Honores de Estado para el expresidente

El adiós a Adolfo Suárez tendrá todos los honores de Estado. El país despedirá con tres días de luto y un funeral de Estado con la presencia de las más altas autoridades del país al que fue el primer presidente de la democracia. Las honras fúnebres a Suárez, como ya ocurriera con su sucesor en el cargo, Leopoldo Calvo-Sotelo, incluirán también 24 horas para que hoy los españoles puedan presentar sus respetos al expresidente en el Congreso de los Diputados, en el que tantas y tan intensas horas vivió.

El cuerpo de exjefe del Ejecutivo fue velado ayer por sus más allegados en la capilla de la Clínica Cemtro hasta poco antes de la medianoche. Luego, se cerró el velatorio.

Según informó el Ministerio de la Presidencia, que se ha hecho cargo de la coordinación de las exequias, sus restos mortales, envueltos en una bandera española, serán llevados hoy por la mañana al Congreso de los Diputados en un cortejo encabezado por la Policía Municipal y escoltado por motoristas de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía. Está previsto que el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y los presidentes del Congreso y Senado, Jesús Posada y Pío García Escudero, además de otros representantes de las más altas instituciones, esperen la llegada de los restos mortales en la escalinata del palacio de la carrera de San Jerónimo. El ataúd del expresidente pasará por la puerta de los Leones, que sólo se abre en ocasiones excepcionales.

La capilla ardiente abre a las diez de la mañana y durante 24 horas la ciudadanía podrá presentar sus respetos a los restos mortales. Durante la mañana, los Reyes, acompañados en este caso por la infanta Elena, y no por los Príncipes de Asturias -que estarán en el funeral del alcalde de Bilbao Iñaki Azkuna-, también acudirán al Congreso para dar su adiós a Suarez. Allí, don Juan Carlos, en una ceremonia con la sola presencia de autoridades, impondrá a título póstumo a Suárez la primera y más alta condecoración civil que se otorga en España, el Collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III, cuya concesión aprobará el Gobierno en sesión extraordinaria a las 9.30 horas de la mañana.

Tercera vez

Esta será la tercera vez en la historia reciente en la que la Cámara baja acoja una capilla ardiente, tras la del expresidente Leopoldo Calvo Sotelo y la de Gabriel Cisneros, uno de los padres de la Constitución. Las familias de otros de los ponentes de la Carta Magna, como Manuel Fraga, Gregorio Peces-Barba y Jordi Solé Tura, y también el expresidente de la Cámara baja Félix Pons, rechazaron el ofrecimiento.

Concluida la capilla ardiente, mañana por la mañana el féretro de Adolfo Suárez será llevado por un piquete de honor fuera del Congreso, donde se le rendirán honores militares y se entonará el himno nacional. Luego, su cuerpo, sobre un armón de artillería y seguido a pie por la familia y las autoridades, será conducido hasta la plaza de Cánovas del Castillo, donde una salva será su último adiós oficial. Inmediatamente después, sus restos serán llevados a Ávila, donde será enterrado en la catedral de la capital abulense. Hoy mismo, los restos de su esposa, Amparo Illana, enterrada en 2001 en la capilla de Mosén Rubí, serán exhumados y llevados al templo catedralicio de Ávila para ser enterrados de nuevo junto a los de su marido.

Los restos de ambos, después de la celebración de una misa de corpore insepulto, serán inhumados en el claustro de la iglesia, el mismo lugar donde desde 1984 descansan los del presidente de la República en el exilio Claudio Sánchez-Albornoz.

Entre tanto, el Gobierno decretó ayer tres días de luto oficial por la muerte del exjefe del Ejecutivo. A partir de este lunes y durante el martes y el miércoles, todas las banderas de los edificios públicos de la administración central, incluidas sedes diplomáticas, gobiernos autonómicos y locales, ondearán a media asta. Durante esas tres jornadas de luto, igualmente, quedarán suspendidos todas las celebraciones que involucren a administraciones públicas.

El gran acto de homenaje oficial, no obstante, no tendrá lugar hasta probablemente el 31 de marzo. Será entonces cuando tenga lugar el funeral de Estado por expresidente Suárez en la catedral de La Almudena de Madrid, con la presencia de los Reyes y representantes de todas las instituciones del Estado.