Imagen facilitada por el Gobierno de la reunión entre Mariano Rajoy y los agentes sociales.
Economia

Los sindicatos demandan «compromisos concretos» para reactivar el diálogo social

Las centrales aceptan negociar una revisión al alza de los sueldos para 2015-2017 y CEOE pide una rebaja del salario mínimo para jóvenes

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los principales sindicatos, CC OO y UGT, y la patronal CEOE comienzan a tomar posiciones ante la posible reanudación del diálogo social -muy lesionado desde la aprobación de la última reforma laboral- tras la reunión que mantuvieron el martes con el presidente del Gobierno y con la ministra de Empleo en la Moncloa. Las centrales optaron ayer por rebajar las expectativas en torno a los posibles frutos de un encuentro que, según desveló el líder de UGT, Cándido Méndez, se produjo por iniciativa de Mariano Rajoy, y condicionaron cualquier avance a «compromisos concretos».

La resaca de la reunión entre Gobierno, sindicatos y patronal sirvió para conocer algunos detalles sobre cómo se fraguó y las expectativas que, a poco más de dos meses para las elecciones europeas, el Ejecutivo ha querido crear en torno al diálogo social. Según explicó desde Bruselas el secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, Rajoy animó a las dos partes a rubricar un acuerdo salarial para el trienio 2015, 2016 y 2017 similar al que se pactó en 2012 y que expira el próximo 31 de diciembre. «El presidente del Gobierno, tras valorar muy positivamente -podría haberlo hecho en su momento- el acuerdo de convenios colectivos que firmamos en el año 2012 nos ha animado a suscribir un nuevo acuerdo», señaló Toxo.

El líder de CC OO dejó la puerta abierta a iniciar esa negociación. Eso sí, dejó claro que se sentarían a la mesa con el objetivo de buscar un acuerdo siempre que las organizaciones patronales acepten una revisión «moderada» al alza de los salarios que se traduzca en mejoras del poder adquisitivo de los trabajadores que favorezcan el consumo. «Estamos por la labor, por consolidar el cambio de ciclo en la economía en España, pero creemos que es necesario que los salarios tomen una mayor participación en cuanto a las condiciones de vida de la gente y su potencial para animar la demanda interna», resaltó.

Toxo pidió a la patronal que «reflexione» sobre el papel que los salarios pueden jugar como acicate para el consumo y resaltó que «globalmente» la orientación debe de ser su «recuperación progresiva», tanto en el sector público como en el privado. No obstante, reconoció las dificultades que entraña ese objetivo por la enorme variedad de situaciones que atraviesan las empresas en los distintos sectores. Aún así, confió en que CEOE acepte negociar una subida que se aplicaría «de forma moderada seguramente, con indicaciones distintas para según los sectores» pues «algunos tienen más potencial de mejora» que otros.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, condicionó cualquier avance a la adopción de «compromisos concretos». Méndez recordó que el diálogo social «ha estado bajo mínimos» debido a las «medidas muy lesivas contra los trabajadores» tomadas por el Ejecutivo. En ese sentido, aseguró que mantienen discrepancias en temas muy importantes como la reforma laboral, pero resaltó que «no son óbice para que nos llame y asistamos a una reunión». Méndez cree que el encuentro del martes evidencia que Rajoy ha llegado a la conclusión «de que no se puede gobernar en contra de todos» y de que es importante la contribución de más actores, «especialmente de las organizaciones sociales».

Rajoy, sin triunfalismos

Según Méndez, el martes pasado el presidente no se mostró tan optimista al hablar de recuperación como en sus últimas declaraciones públicas. «No fue triunfalista. Reconoció que hay obstáculos», aseguró el responsable sindical. Además, dijo que Rajoy también les explicó que la Comisión Europea «va a ser más tolerante con el objetivo de déficit», aunque matizó que eso no significa una flexibilización de los límites. Igual que Toxo, el líder de UGT destacó que España afronta una etapa de crecimiento débil y paro demasiado alto, por lo que insistió en la necesidad de consolidar el crecimiento mediante la demanda interna y la recuperación de las familias.

El presidente de CEOE, Juan Rosell, dijo que volvió a plantear en el encuentro alguna de sus viejas recetas, como la de implantar un salario mínimo de entrada para jóvenes, vinculado a la formación. Una propuesta que Méndez rechazó por «inconstitucional» y Toxo despreció por parecerle una «antigualla franquista».