Varios turistas visitan los restos de la ciudad de Petra. :: REUTERS
Sociedad

Los secretos astronómicos de Petra

Un estudio del Instituto de Astrofísica de Canarias y el CSIC revela que los equinoccios y los solsticios influyeron en su edificación

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La enigmática Stonehenge, la impresionante pirámide de Keops o la impactante Chichén Itzá asombran a los arqueólogos del mundo entero no solo por su grandiosidad y belleza, sino por cómo se construyeron. Y es que la edificación de estas maravillas del pasado no solo demuestra el dominio de la arquitectura por parte de sus autores, sino que revelan también un profundo conocimiento del Cosmos porque en su cimentación también se tuvieron en cuenta fenómenos astronómicos. La fascinante ciudad de Petra en Jordania se une ahora a ese grupo de construcciones históricas que guardan una estrecha vinculación con los movimientos en el universo, según una reciente investigación en la que han participado científicos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), el CSIC y la Universidad italiana de Perugia.

Los principales edificios de la capital del reino nabateo -tumbas, templos y palacios- se erigieron en función de los equinoccios, solsticios y otras combinaciones planetarias. El estudio, publicado en la revista Nexus Network Journal, ha analizado cómo la luz del sol recorre un determinado lugar de estos monumentos en fechas astronómicas clave. Por ejemplo, en el caso del denominado 'monasterio' de Petra, durante la puesta de sol en el solsticio de invierno la luz del astro rey entra por la puerta del complejo hasta iluminar una especie de altar sagrado denominado 'motab'.

«Las orientaciones astronómicas fueron a menudo parte de un plan elaborado y, posiblemente, una huella de la naturaleza astral de su religión, que mostraba impresionantes 'hierofanías' o actos de manifestación de lo sagrado en edificios relacionados con los tiempos de culto y adoración», explica Juan Antonio Belmonte, investigador del IAC y coordinador del trabajo.

La importancia que esta civilización -que se extendió por la Jordania actual hace 2.000 años- daba a estos fenómenos astronómicos se demuestra al comprobar su influencia en la construcción de lugares tan importantes como la tumba de sus reyes. Así, durante la puesta de sol del equinoccio la luz solar atraviesa la puerta principal de la cámara del rey Maliko II y recorre su interior hasta marcar las esquinas. «Los monumentos nabateos son maravillosos laboratorios donde interaccionan las características del paisaje y los acontecimientos solares, lunares y de otros astros», insiste Belmonte.

Esta investigación vuelve a poner de manifiesto la influencia del Cosmos en los pueblos antiguos. Sin embargo, también añaden un nuevo misterio a la forma en que estas civilizaciones tenían para levantar monumentales edificios y, en el caso de los nabaetos, de excavarlos en la roca.