Actitud, lucha y compromiso pero con el mismo resultado

El Atlético Sanluqueño se desangra poco a poco, sin remedio, incapaz de evitar un descenso que se va asumiendo jornada tras jornada. Los verdiblancos se resisten a morir sin lucha, y pelearán hasta que los números le den la extrema unción, pero parecen condenados. Las derrotas en El Palmar son claves para un equipo que como visitante normalmente tiene las de perder.

Ayer encajaba un nuevo revés en el feudo del Granada B. Un tropiezo lógico, por la mínima, pero doloroso porque pasa una jornada más y continúa en el farolillo rojo. Antonio Racero 'Puma' hacía lo imposible por alinear un once de garantías, mermado por las bajas de Salvi, Poley, Chakir y Oca.

Aún así, los gaditanos plantaban cara y no se dejaban amedrentar por un filial que venció con muchos apuros, pero venció, y deja a los sanluqueños a cinco puntos de los puestos de permanencia en Segunda B.

Consciente de la desigualdad existente entre ambas escuadras, los sanluqueños metieron mucha intensidad al juego, siendo muy agresivos sin balón y haciendo muchas faltas para frenar la circulación de los rojiblancos. Prueba de ello es que a los diez minutos Antón ya tenía una cartulina amarilla.

Roja y gol de Machís

Los locales sufrían, no se encontraban cómodos ante un rival de mayor experiencia que les estaba sacando del partido. También echaban de menos a hombres importantes como Fatau y Boateng, con el primer equipo, y Carmona, sancionado.

No obstante, la desgracia volvía a cebarse con los verdiblancos. Pasado el ecuador de la primera mitad, el venezolano Machís remataba a gol de cabeza un centro de Cristian Bravo. Y tres minutos después, José ya lo ponía imposible al ser expulsado por una dura entrada sobre este mismo delantero.

Quedaba mucho tiempo, y los locales querían sentenciar cuanto antes. Las diferencias se multiplicaban al jugar ahora contra diez. No obstante, los de Puma se armaban bien en defensa y repelían los ataques granadinistas, que no ampliaban la cuenta antes del descanso.

Mala segunda mitad

Pero en la reanudación llegó la desidia. Joseba Aguado intentó espolear a sus futbolistas, apáticos ante los sanluqueños. Generaban las mejores ocasiones, prácticamente las únicas, pero no eran capaces de sentenciar.

El Granada B, con un jugador más sobre el campo, no encontraba la fórmula para liquidar el encuentro, dando vida a su rival hasta el último minuto. Machís y Puertas disfrutaron de sendas ocasiones, sin acierto. También Marcelo se topaba con el meta Facundo, bien en el uno a uno. Los cambios no cambiaron el panorama y aunque los visitantes entorpecieron la victoria, al final se marcharon con otra derrota.

La permanencia pasa por El Palmar. Y este domingo recibirá al Sevilla Atlético, al borde del descenso y en una mala racha de resultados. Un duelo entre dos equipos con peligro que puede marcar el futuro de los de Puma.