La apatía por la política erosiona el bipartidismo en Andalucía
El PP pierde 9,5 puntos y el PSOE 2,8 desde las elecciones de marzo de 2012, según los sondeos de Capdea
SEVILLA. Actualizado: GuardarLa apatía por la política está erosionando el bipartidismo en Andalucía, según se desprende de las encuestas realizadas por el Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía (Capdea), dependiente de la Universidad de Granada. Este centro realiza dos estudios demoscópicos anuales. En el último conocido el miércoles, solo un 55% de los andaluces iría a votar, un porcentaje más bajo que el de las elecciones de 1990, en las que menos andaluces acudieron a las urnas, un 56%. Cuando el 90% tiene una opinión mala de la situación económica y pocas esperanzas de que remonte, no es extraña la desconfianza en la clase política.
La profesora, politóloga y directora del Capdea, Carmen Ortega, que lleva más de una década observando las reacciones de los andaluces ante la política, así lo entiende y advierte de la alarma de esta desafección. Casi un 80% de los andaluces se manifiesta insatisfecho con el funcionamiento de la democracia. Esta desgana perjudica sobre todo a los dos partidos mayoritarios que gobiernan, PP y PSOE. Desde que comenzó la crisis han ido perdiendo apoyo en beneficio de otras formaciones que van al alza, como IU y UPyD.
Una crisis que dio la oportunidad histórica al PP de gobernar en Andalucía. Los sondeos a partir de 2007 avisaron de un crecimiento de lluvia fina del PP que desde 2010, cuando los primeros recortes de Zapatero, coloca al partido conservador como ganador en unas hipotéticas elecciones en Andalucía. La victoria del PP en las municipales y en las generales de 2011 corroboró aquellos avisos. El PSOE pasa a ser segunda fuerza política en Andalucía y cae en picado con una sangría de alrededor de 700.000 votos, en la que el escándalo de los ERE tuvo también algo que ver.
Llegan las autonómicas de marzo de 2012 y contra el pronóstico de todas las encuestas el PP de Javier Arenas no obtiene mayoría absoluta para gobernar, aunque gana por primera vez en Andalucía. Los recortes de Rajoy hacen mella en un electorado cada vez más desconfiado de la clase política. El resultado fue el siguiente: el PP sacó el 40,6% (50 escaños) de los votos, el PSOE, el 39,5% (47), e Izquierda Unida, 11,3% (12).
El mapa político cambia. El PSOE mantiene la Junta, pero con el respaldo de IU, que entra en el Gobierno. En Madrid, el PP gobierna con mayoría absoluta. Lo que las encuestas del Egopa señalan a partir de entonces es un descenso del PP y del PSOE y un incremento en intención de voto de los partidos minoritarios. El bajón del PP, debido sobre todo a los recortes y reformas de Rajoy, es mayor que el de los socialistas. Pierde 9,5 puntos porcentuales hasta este invierno, aunque en este estudio sube dos puntos respecto al verano de 2013. Lo curioso es que se produce este aumento en unos meses con una gran crisis de liderazgo del PP en Andalucía, resuelta ahora con la llegada de Juanma Moreno en sustitución de Juan Ignacio Zoido. Según Carmen Ortega, este repunte se debe a que ha calado el mensaje del Gobierno de que «la economía va a mejorar» y esto ha pesado más en el electorado conservador que la crisis interna del partido.
Estancamiento
La espectacular bajada del PP en solo dos años hace que el PSOE vuelva a considerarse el partido que ganaría las elecciones, aunque en realidad pierde 2,8 puntos desde el 25 de marzo de 2012, donde obtuvo los peores resultados de su historia. La idea de un PSOE ganador en realidad es ilusoria. Según la serie de sondeos del Egopa este partido no logra salir del estancamiento y tampoco aprovecha la debacle del PP. En el verano de 2012, solo cuatro meses después de los comicios, el PP ya había perdido casi dos puntos y medio (37,62), pero el PSOE solo ganó dos décimas (39,76). Aún así se coloca por delante y en esta posición permanece desde entonces.
Ello pese a seguir perdiendo puntos. En invierno de 2013 al PSOE solo lo votaría el 38,01% (1,4 puntos menos desde las elecciones). Vende la encuesta como una victoria porque el PP baja al 34,41%, el porcentaje que tenía en 2007. Aún debería verse más bajo, en el 29% en el verano de 2013. Mientras el PSOE también sigue cayendo, al 36,1%. El 'efecto Susana Díaz' ha impedido que siguiera cuesta abajo, según la profesora malagueña Carmen Ortega. En el reciente estudio sube siete décimas, 36,7%, pero lejos todavía del porcentaje del 25M.
¿A dónde se van los votos que pierde el PP en estos sondeos? Desde luego muchos a la abstención, pocos al PSOE y algunos a otras fuerzas. Aquí entra en juego la quiebra del bipartidismo. Carmen Ortega subraya el alza de partidos como UPyD, que desde el verano de 2012 se cuela en el Parlamento en sentido figurado. Este partido exige un cambio de la Ley Electoral para garantizar que con su voto pueda entrar en la Cámara. El partido de Rosa Díaz pasa del 4,06% en el verano de 2012 a 6,40 en invierno de 2013 y 6,75% en verano de ese año. Ahora escala al 7,4% consolidándose como tercera fuerza con claras posibilidades de lograr escaño.
Otra subida espectacular ha sido la de IU. Bien por efecto de estar en el Gobierno o por los desencantados del PSOE, la fuerza de Diego Valderas asciende a 12,73% en el verano de 2012; a 14,24% en invierno de 2013 y a 18,69% en verano de este año. En el último estudio baja al 15,5%, lo que se explica por el aumento tan espectacular de la abstención.
Esta pasa del 37,5% en el verano de 2012 al 46,94% en invierno de 2013; después al 49,30% del verano de 2013, hasta el 44,3% de este último sondeo. La abstención en los comicios del 25 de marzo fue del 39,22%.