En guardia

Estamos de enhorabuena los gaditanos de que J. M. Moreno Bonilla haya sido elegido candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía por el PP-A, pues de ser elegido J. Luis Sanz, el control del partido regional estaría totalmente en manos del poder sevillano y el proyecto del alcalde Zoido de Dragar el Guadalquivir sería un hecho inevitable.

Los grandes transatlánticos arribarían en Sevilla, ciudad turística mundial, las empresas de nuestra Zona Franca correrían igual suerte y los astilleros seguirían sus pasos al olor del trabajo. Esto sería no sólo la ruina de Cádiz, sino de la Plataforma Logística del Sur de Europa, del proyecto de las Aletas y del nuevo muelle de contenedores.

No es momento de dormirse sino de estar en guardia para machacar este proyecto de los políticos sevillanos.

Argumentos para ello hay miles, tales como que: un país con 7000 Kms de costa y con puertos de la importancia de Huelva, Cádiz, Algeciras y Almería no tiene necesidad de construir un puerto fluvial.

Daría lugar al cierre del aeropuerto de La Parra, la ruina de los magníficos arrozales de las marismas dada la entrada masiva de la salinidad del mar, el quebranto de la pesca en el estuario sanluqueño y del golfo de Cádiz, el deterioro ecológico de las marismas de Doñana, la rotura del suelo del cauce del río, ya muy quebrantado, creando un peligro ecológico, inundaciones y el peligro para esos grandes navíos de navegar por un canal de solo 60 m. de anchura con meandros y las frecuentes nieblas del valle del Guadalquivir. ¿ No son suficientes argumentos y poderosas razones de peso para oponerse a tan nefasto proyecto?