Las diputadas protagonizan un pleno duro y tenso
La mayoría de los grupos eligió a mujeres para defender sus posiciones en una sesión en la que predominó el tono beligerante
MADRID. Actualizado: Guardar«Esto es un insulto a las mujeres, al Estado laico y la democracia». La afirmación de la portavoz de Izquierda Plural, Ascensión de las Heras, muestra el tono duro y tenso del debate sobre el aborto que se vivió ayer en el Congreso. No solo por las críticas vertidas, sino por el enfado sincero que se desprendía de algunas de las intervenciones de las diputadas. Y es que salvo PNV y UPyD, el resto de partidos confió en una mujer para subir a la tribuna. «Hoy está en juego la libertad de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y su maternidad», aseguró De las Heras, una de las más vehementes y beligerantes en su discurso. Un argumento, el derecho y libertad de las mujeres, que fue muy recurrente durante toda la sesión por los diferentes grupos. «El único que ha entendido esta reforma ha sido Le Pen», insistió la socialista Elena Valenciano.
La diputada del PP Marta Torrado tampoco tuvo problemas en denunciar la forma de hacer oposición del PSOE. «Ustedes tienen una forma muy particular de entender la democracia», aseguró.
Por su parte, la portavoz de Convergencia acudió a los datos para atacar al Gobierno y recordó que con la ley actual han descendido un 5% el número de interrupciones voluntarios de embarazos en el último año. En cualquier caso, la diputada de Amaiur Onintza Enbeita fue la más taxativa: «En mi coño y en mi moño mando yo. Solamente yo».
