Los Legionarios de Cristo piden «perdón» por los pecados de su fundador
La declaración histórica se produce un día después de que la ONU censurara al Vaticano por encubrir la pederastia en el clero
MADRID. Actualizado: GuardarJusto después de que la ONU enmendara la plana al Vaticano por su indulgencia con los casos de pederastia en el clero, los Legionarios de Cristo han pedido perdón por los «gravísimos e inmorales abusos» perpetrados por su fundador, el mexicano Marcial Maciel. «Queremos expresar nuestro hondo pesar por el abuso de seminaristas menores de edad, los actos inmorales con hombres y mujeres adultos, el uso arbitrario de su autoridad y de bienes, el consumo desmesurado de medicamentos adictivos y el haber presentado como propios escritos publicados por terceros», sostiene en una petición oficial de perdón el movimiento católico, en la que expresa también su «solidaridad» con las víctimas.
La congregación ultraconservadora, que gozó de la simpatía y la protección de Juan Pablo II, entona el mea culpa y lo hace de forma descarnada, sin remedios lenitivos. Para los legionarios, especialmente los más jóvenes, corría prisa pedir perdón a las víctimas de los abusos sexuales y psicológicos que Maciel cometió a lo largo de su dilatada vida eclesiástica, que duró 60 años.
Muerto el fundador en 2008, la confesión de los pecados es más fácil. El comunicado ha sido escrito por el Capítulo General Extraordinario de los Legionarios, una especie de asamblea compuesta por 61 delegados que desde el día 8 de enero permanece reunida. La organización, que debate ahora su futuro, eligió en enero como nuevo director general al mexicano Eduardo Robles Gil, de 61 años, cuyo cargo ha sido confirmado ahora por el papa Francisco. «Nos apena que muchas víctimas y personas afectadas hayan esperado en vano una petición de perdón y de reconciliación por parte del padre Maciel y hoy queremos hacerla nosotros, expresando nuestra solidaridad con todas ellas», dice el comunicado.
La congregación, que vio la luz en 1941, consiguió durante décadas silenciar las denuncias contra Maciel.