ESPAÑA

Los Bárcenas se pasan a la marca blanca

Rosalía Iglesias había pedido una asignación de 575 euros, pero los jueces creen que esa cantidad es «excesiva» y le invitan a bajar su «ritmo de vida» La Audiencia Nacional autoriza a la mujer y al hijo del extesorero a disponer de 300 euros al mes para ir al super

MADRID. Actualizado: Guardar
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Trescientos euros al mes. Casi, casi el mismo importe de alguno de los platos o vinos que la familia Bárcenas solía disfrutar en los exclusivos restaurantes de las estaciones de esquí alpinas de Avoriaz, Val d'Isère, Tignes o Zermatt. Adiós definitivo a aquellos manjares en los viajes de lujo y los safaris por África. Adiós también, como tantos españoles, a comer ternera o pescado fresco. A partir de ahora, cerdo, pollo, pasta, arroz, patatas y mucha marca blanca.

La Audiencia Nacional ha autorizado a Rosalía Iglesias, la mujer de Luis Bárcenas, a que pueda disponer de 300 euros mensuales de sus cuentas bloqueadas para su alimentación y la de su hijo, Guillermo Bárcenas. Ni uno más. La otrora adinerada vecina del madrileño barrio de Salamanca tendrá un presupuesto medio para ir al súper de diez euros diarios. Una cantidad suficiente para hacer la compra si acude a alguna de las conocidas superficies baratas, que también las hay en esa exclusiva zona de la capital.

Rosalía Iglesias había pedido al tribunal de la calle Prim que, al menos, le dejara acceder a 575 euros mensuales para la compra, pero la Sala de lo Penal cree que esa cantidad es «notoriamente excesiva a la presente situación». La Sección Cuarta, que no especifica si de esos 300 euros debe salir el dinero para comprar, por ejemplo, los productos de limpieza y hogar, cree que con esa asignación madre e hijo tienen más que suficiente para apañárselas. Es más, los magistrados instan a ambos a «reducir» el «ritmo de vida anterior de la familia» a otro «más acorde tanto a las circunstancias procesales, como a las de índole personal y familiar» de la imputada, que tiene todos sus bienes y activos bloqueados.

«Procedencia desconocida»

A pesar de que los 300 euros es solo la mitad de lo que pedía Iglesias, la mujer del extesorero todavía tiene que estar contenta. El juez del caso, Pablo Ruz, se había negado el pasado noviembre a desbloquear un solo euro para el sustento de la esposa y el vástago de Bárcenas, alegando que Rosalía Iglesias estaba disponiendo de un capital de «procedencia desconocida». Ruz se negó a darle dinero para comer basándose en que la imputada, a pesar del bloqueo de las cuentas, pagaba cada mes los 1.500 euros del 'leasing' (alquiler con opción a compra) de, según su descripción, un «opulento» Land Rover valorado en 91.936 euros. La defensa de Iglesias alegó que ese dinero para el coche se lo prestaba un familiar y por eso recurrió la decisión de Ruz de no desbloquear nada para comer.

El fallo de la Sala de lo Penal conocido ayer es el último capítulo de la guerra económica abierta entre Iglesias y Ruz, después de que el juez ordenara en septiembre el embargo de todos sus bienes para hacer frente a la fianza civil de seis millones de euros que impuso a la mujer del extesorero del PP tras descubrir que también ella tenía cuentas a su nombre en Suiza, donde su marido llegó a amasar 48,2 millones. Iglesias pidió en principio que se le desbloquearan mil euros mensuales para gastos personales como ropa, calzado, peluquería, libros o farmacia y otros 400 euros para el peculio de su marido en Soto del Real. El juez se negó a liberar tal cantidad por considerar que se trataban de gastos «innecesarios, superfluos y suntuarios y no precisos para la vida cotidiana».

No obstante, sí que accedió a desbloquear las cuotas de los gastos de comunidad y los seguros del hogar de sus tres casas en Madrid, Baqueira y San Pedro de Alcántara, aunque no para las facturas de gas, luz y teléfono de las últimas dos viviendas en las que no residen. Además, para «no perjudicar a terceras personas ajenas», permitió que se abonaran desde esas cuentas bloqueadas los gastos de Seguridad Social de la empleada del hogar.