El mercado acoge con frialdad el canje de la deuda perpetua de Eroski
BILBAO. Actualizado: GuardarA la indignación de los afectados se sumó ayer la desconfianza del mercado, que acogió con frialdad el canje pactado por Eroski y los principales bancos comercializadores para su deuda perpetua. La oferta, condicionada al éxito de la refinanciación de su pasivo, consiste en una quita del 30%, el pago en metálico del 15% y el abono del 55% restante mediante bonos subordinados (se sitúan detrás de la deuda 'senior' en caso de quiebra) a 12 años, remunerados al Euríbor más tres puntos. Se supone, por tanto, que si todo sale bien el ahorrador va a recuperar el 70% de su inversión más los intereses acumulados. La cotización debería, en consecuencia, acercarse a ese porcentaje. Pero ayer, primer día de negociación una vez conocidas las condiciones del canje, las aportaciones de 2002-2004 solo subieron del 38% al 41,8% del valor nominal, mientras que las de 2007 pasaron del 32,4% al 35,6%. Apenas se cruzaron operaciones.
«Lo que refleja ese precio es que los bonos subordinados cotizan al 50%, en línea con los de las cajas nacionalizadas y otras empresas en dificultades. Es algo lógico porque son bonos basura. Eroski está en una situación muy delicada, como demuestra el hecho de que haya tenido que pedir otra vez la refinanciación de la deuda», señala un analista bursátil que prefiere permanecer en el anonimato.