Israel despide al «gran guerrero»
El país rinde tributo al exprimer ministro Ariel Sharon en la capilla ardiente del Parlamento antes del funeral militar
Actualizado: GuardarLos restos del exprimer ministro israelí Ariel Sharon, fallecido el pasado sábado a los 85 años tras permanecer ocho años en estado vegetativo, fueron trasladados ayer a una capilla ardiente frente a la Knesset (el Parlamento) en un ataúd cubierto con la bandera del país para que los israelíes que lo deseasen pudieran darle su último adiós.
Esta tarde se celebrará con honores de Estado un funeral militar y una ceremonia oficial en la misma sede parlamentaria, horas antes de su entierro en el rancho familiar de los Sicomoros, donde yace su segunda esposa, Lily, difunta hace catorce años a causa de un cáncer. «Era un gran guerrero», proclamó.
En el marco de la reunión semanal del Ejecutivo, el actual primer ministro, Benyamin Netanyahu, le definió como «uno de los grandes militares que este pueblo ha visto en tiempos recientes y en su historia». Por su parte, el presidente del país, Simón Peres, que siempre mantuvo una relación modélica con Sharon a pesar de sus desavenencias políticas, depositó una corona de flores ante el féretro como gesto simbólico.
El presidente de EE UU, Barack Obama, ha confirmado que la delegación estadounidense que asistirá a la ceremonia fúnebre estará encabezada por Joe Biden. El vicepresidente estará acompañado de los congresistas demócratas Eliot Engel y Debbie Wasserman Schultz, así como del embajador en Israel, Daniel Shapiro, y su antecesor en el puesto, Daniel Kurtzer, quien coordinó la legación diplomática en Tel Aviv entre 2001 y 2005, etapa en la que Sharon ejerció como primer ministro tras ocupar la cartera de Asuntos Exteriores.
Una amenaza para Israel
En representación del Gobierno español acudirá el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, que ya se encontraba en Israel de visita oficial con el objetivo de estrechar la cooperación bilateral en cuestiones de seguridad, terrorismo yihadista, extranjería y procesos electorales. En las exequias participarán otros mandatarios extranjeros como el representante del Cuarteto para Oriente Próximo y expremier británico, Tony Blair, el primer ministro checo, Jiri Rusnok, el presidente de la Duma rusa, Sergey Naryshkin, y el ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier.
Como era previsible, la muerte del polémico 'Arik' -diminutivo con el que se le conocía popularmente- fue recibida con júbilo por sus enemigos, pero también por el sionismo radical, que nunca dudó a la hora de censurar su decisión de evacuar a los colonos de la Franja de Gaza en 2005. Orit Struck, diputada del partido ultraortodoxo Bayit Yehudi (Hogar Judío), será investigada por la Policía después de manifestar en una red social su «alegría» por el fallecimiento de Sharon. «Es imposible no agradecer a Dios Todopoderoso por llevárselo de la vida pública antes de que pudiera arruinar a los residentes de Cisjordania, la Gran Judea y Samaria con el desastre que sufrieron Gush Katif y la periferia de Gaza», escribió Struck en su muro de Facebook.
No fue la única. Otro activista de la colonía judía de Hebrón, Baruch Marzel, quiso exhibir su «satisfacción por la eliminación de una amenaza para la tierra de Israel». «Sharon era un enemigo. Fue uno de los mayores traidores de la historia de Israel», afirmó en declaraciones a 'The Jerusalem Post'.