El CRMF vuelve a abrir sus puertas tras finalizar la primera fase de los trabajos de remodelación

El Centro de Recuperación de Personas con Discapacidad Física, CRMF-IMSERSO de San Fernando, reabrió ayer sus puertas después de que se hayan recepcionado las obras de la primera fase de la remodelación integral que está efectuando en sus instalaciones. La directora-gerente, Concha Mayoral, explicó que los usuarios «se van a encontrar con numerosas mejoras que van a redundar en una mayor calidad del servicio que van a recibir».

Por ejemplo, en esta primera fase de obras ya concluida, se ha remodelado la llamada Residencia Grande, en lo que se refiere a la carpintería general de armarios, ventanas y puertas y también las zonas de acceso y los pasillos. Se han creado seis nuevos baños asistidos, se ha renovado la sala de curas y el despacho de la Educadora Técnica Asistente de Rehabilitación (ETAR). Además, en cuanto a los servicios que afectan directamente a los usuarios, se han realizado mejoras en las habitaciones. «Hemos sustituido las tradicionales llaves de apertura por tarjetas para facilitar su manejo; se ha renovado todo el mobiliario y se han remodelado los armarios en los que han instalado barras abatibles para hacerlos más accesibles». Además de estas mejoras, también se ha reformado el sistema de calefacción en las dos residencias para hacerla más eficiente y sostenible y se han instalado detectores de presencia.

Las obras continuarán durante los próximos meses en otras zonas del CRMF, como el pavimento o la cocina, «espacios donde su grado de afectación a los usuarios ya no es tanto y, por ello, es compatible con la actividad más o menos normalizada».