El Gobierno desprecia el comunicado de los reclusos
«Dicen que han causado daño. Gracias, lo sabemos. Por eso están en la cárcel», ironiza Jorge Fernández Díaz
MADRID. Actualizado: GuardarFirmeza y, sobre todo, desprecio. El ministro del Interior subrayó una y otra vez que para el Gobierno el comunicado de los presos de ETA en el que anuncian que reconocen el daño causado y renuncian al terrorismo no tiene «ningún valor» y, sobre todo, no va a tener la menor consecuencia en la política penitenciaria. Jorge Fernández Díaz, que hasta ahora, como el resto del Gobierno, había guardado silencio sobre el anuncio del EPPK, aprovechó su primera comparecencia para subrayar que el Ejecutivo considera el texto mera «propaganda», que «no cambia nada».
Fernández mostró su lado más caústico para remarcar el poco crédito que Interior da al documento de los presos. «Han dicho que han causado daño. Muchas gracias, lo sabemos perfectamente. Por eso precisamente están en la cárcel cumpliendo las condenas que se le han impuesto», ironizó antes de recordar, también con sorna, que el anuncio de los presos tuvo lugar el 28 de diciembre, día de los Inocentes.
El Ministerio, que hasta ahora había dado la callada por respuesta, ya había anunciado a través de diversos portavoces que mantendrá intacta la política penitenciaria y que el comunicado no va a hacer mover un milímetro la dispersión de los 396 internos que se encuentran repartidos por 49 prisiones de toda la geografía peninsular española. Fernández dio a entender que la única fórmula para un acercamiento sigue siendo la individual, la de renegar públicamente de la banda. Un desmarque, dijo, que no ha hecho ninguno de los miembros del EPPK en prisión. «Una declaración general no tienen ningún valor», abundó.
«La responsabilidad penal es personal», apuntó el responsable de la lucha antiterrorista antes de recordar que ninguno de los presos, que siguen fieles a ETA, ha cumplido con las cuatro exigencias para entrar en el plan de reinserción que abre las puertas al acercamiento y a otros beneficios penitenciarios. «Estas personas no han pedido perdón a sus víctimas, no se han arrepentido de sus crímenes, no se han desvinculado de ETA ni han manifestado su intención de colaborar con las autoridades judiciales», apostilló.
Fernández dijo en voz alta lo que apuntan los análisis de los especialistas de su ministerio; esto es que el comunicado del EPPK es parte de una táctica para presionar al Ejecutivo para acercar presos de forma colectiva. «El Gobierno no va a estar pendiente de los comunicados que por propaganda y al servicio de sus estrategias y para la teatralización que necesita ETA o sus presos decidan en cada momento. Ese comunicado no cambia nada de la política antiterrorista y la política penitenciara en particular», insistió.