Cuba llora al «entrañable» amigo de Fidel Castro
LA HABANA. Actualizado: GuardarLa «entrañable amistad» de Nelson Mandela y Fidel Castro se remonta a los años 70-80, cuando el Gobierno comunista enviaba miles de soldados a Angola para apoyar a las fuerzas 'antiapartheid' en el sur del continente africano. Madiba mostró su agradecimiento con efusivos abrazos cada vez que coincidía con Fidel.
Su muerte fue acogida en Cuba con tristeza, que declaró duelo oficial y nacional por un hombre que calificaron de «ejemplo revolucionario» y símbolo de «libertad y dignidad humana». El presidente, Raúl Castro, dijo que de Mandela «nunca podremos hablar en pasado» mientras los medios isleños dieron una amplia cobertura a su vida.
Cuba fue uno de los primeros países que visitó el icono sudafricano al recuperar su libertad. También fue el primer país con el que estableció lazos diplomáticos tras ganar las elecciones en 1994. Castro, cuyo olfato político admiten hasta sus adversarios, lo recibió con grandes honores en 1991. El Consejo de Estado le otorgó a Mandela la Orden José Martí, la máxima condecoración.
En aquella ocasión, Mandela afirmó que los cubanos tendrían siempre «un lugar destacado en el corazón de África» por su «contribución a la independencia, la libertad y la justicia». «Yo me encontraba en prisión cuando me enteré de la ayuda que las fuerzas internacionalistas cubanas le estaban dando al pueblo de Angola cuando se vieron atacados. Nosotros estamos acostumbrados a ser víctimas de otros países. No existe otro caso de un pueblo que se haya alzado en defensa de uno de nosotros», expresó.
«El más profundo tributo»
Castro agradeció esas palabras al señalar que ese discurso había sido «el más grande y el más profundo tributo que se les ha rendido jamás a los combatientes internacionalistas». No en vano, en la capital de Sudáfrica, 95.000 nombres están grabados en una pared de piedra, entre ellos 2.107 de cubanos muertos en Angola, que pese a haber sido una derrota frente a las fuerzas racistas de Pretoria marcó el principio del fin del régimen del 'apartheid'.
La guerra civil angoleña duró casi 30 años, desde 1975 hasta 2002. Cuba envió al menos 50.000 soldados, 10.000 a Cuito Cuanavale. «Sin la derrota en Cuito Cuanavale nuestras organizaciones nunca hubieran sido legalizadas», dijo Mandela en 1991 en Cuba, con Fidel Castro a su lado.