La paz en Siria busca una nueva oportunidad el 22 de enero en Ginebra

El clima de entendimiento que emanó del acuerdo nuclear alcanzado con Irán arrojó ayer un soplo de optimismo sobre el conflicto sirio. Después de meses de infructuosas negociaciones para fijar la fecha de la próxima conferencia de paz, bautizada como Ginebra-2, la comunidad internacional ya ha señalado el día en que por primera vez la oposición y el régimen de Bashar el-Asad se sienten juntos en la misma mesa. Será el 22 de enero, según informó la ONU en un comunicado en el que el secretario general, Ban Ki-moon, manifestó que el «claro objetivo» del encuentro será el establecimiento de un gobierno de transición.

A falta de ocho semanas para que se produzca la esperada cita, Ban advirtió tanto al régimen sirio como a la oposición de que sería «imperdonable» no aprovechar esa oportunidad para acabar con una guerra que en 31 meses ha segado la vida de más de 100.000 personas. Por ese motivo, reclamó «visión y liderazgo» a todas las partes y las instó a dar pasos que conduzcan desde ahora hacia el éxito, como un alto el fuego, acceso humanitario, la liberación de los detenidos o el regreso de los nueve millones de refugiados.

Una de las principales incógnitas que rodea la cumbre es si finalmente Irán contará con representación en Ginebra. No en vano, la elaboración de la lista de invitados ha sido uno de los asuntos que más ha dificultado la celebración de la conferencia.