El euribor cae hasta mínimos de junio tras la histórica rebaja de tipos acordada por el BCE
El indicador de referencia para las hipotecas registra su mayor descenso diario, casi tres centésimas, desde noviembre de 2011
MADRID. Actualizado: GuardarEl euribor a doce meses, principal índice hipotecario al que están referenciados el 80% de los préstamos para la adquisición de viviendas, ya ha empezado a reflejar los efectos de la sorpresiva decisión del Banco Central Europeo (BCE) de rebajar los tipos de interés un cuarto de punto, hasta el mínimo histórico del 0,25%. Ayer, el día después de que Mario Draghi hiciera pública la medida, el indicador registró una caída de casi tres centésimas en tasa diaria, la mayor en dos años, y se situó en el 0,506%, su valor más bajo desde junio pasado.
Este es el mayor descenso diario que registra el indicador hipotecario europeo desde noviembre de 2011, cuando se hundió de golpe seis centésimas (hasta el 2,044%) después de que el BCE hiciera pública una decisión similar. Entonces, la bajada del precio oficial del dinero acordada por el Consejo de Gobierno del regulador europeo había recortado los tipos de interés al 1,25%.
En la actualidad el euribor ya se mueve en niveles muy inferiores a los de 2011 (cerró el pasado mes de octubre en el 0,541% y su media de noviembre es del 0,529%). Los expertos coincidieron en que es probable que haya todavía recorrido a la baja.
La principal y lógica consecuencia de cualquier rebaja en el precio oficial del dinero, y por extensión del euribor, es su eventual traslado a los recibos que las familias pagan por las hipotecas de sus viviendas. De hecho, miles de hogares que tienen pendiente revisar la cuantía de sus cuotas (el momento de aplicar esa revisión dependerá de la fecha de formalización del contrato, suele ser anual o semestral) aspiran a ver reducida en los próximos meses la porción de sus rentas que se 'come' el préstamo de la casa.
En España, sobre todo a partir de la primera década de este siglo, en que los precios del mercado inmobiliario estuvieron determinados por la burbuja del ladrillo, la hipoteca constituye una de las principales -e ineludibles- partidas de gasto para decenas de miles de familias. El 97% de los préstamos para la adquisición de viviendas concedidos por la banca están contratados a tipo variable y el 80% tienen como referencia el euribor a un año.
Pero la intensidad, medida en euros contantes y sonantes, con que su bajada reducirá los recibos mensuales también depende de los diferenciales que, sobre el euribor, aplican las entidades de crédito, hoy mucho más elevados que hace unos años.
La teoría dice que la menor presión de la hipoteca sobre el conjunto de las rentas del hogar debería dar margen a las familias para disponer cada mes de unos cuantos euros más para destinarlos al consumo. Sin embargo, la experiencia de la crisis actual indica que ese estallido de alegría consumista -normal en épocas de bonanza- es poco probable que ocurra. El paro y las rebajas de sueldos que sacuden o amenazan a muchos hogares han hundido el gasto hasta niveles de pura superviviencia y cuando a fin de mes sobra algo de dinero las familias prefieren destinarlo a ahorrar por lo que pueda venir o a tapar agujeros pendientes.
Acceso al crédito
Aún así, el ex consejero del BCE José Manuel González-Páramo celebró ayer la decisión del organismo que preside Mario Draghi de bajar los tipos de interés al 0,25%. En un acto del IESE en Barcelona, auguró que el gesto del regulador será positivo para el conjunto de la economía, pues además de dar un respiro a las familias hipotecadas favorecerá el acceso al crédito en los países donde fluye con mayor dificultad, entre ellos España. Aún así, González-Páramo abogó por «profundizar en las reformas estructurales» porque de lo contrario «las buenas perspectivas corren el riesgo de defraudar».
Para el director de Asuntos Monetarios del FMI, José Viñals, el recorte de tipos es una decisión «perfectamente justificada y apropiada». Viñals, en declaraciones en el mismo acto del IESE, consideró que la medida «puede ayudar a sedimentar la recuperación de la economía europea que ya se está empezando a percibir». A su juicio, este puede ser un «primer paso» para otras medidas que apoyen el crecimiento.
La bolsa española apenas reflejó los efectos de la rebaja de los tipos de interés. El Ibex-35 cerró la sesión en 9.747,20 puntos con una tímida subida del 0,07%. La prima de riesgo -que mide el diferencial entre el rendimiento del bono español y el alemán a diez años- bajó de 237 a 235 puntos básicos.