Mursi declaró su inocencia ante Ashton
EL CAIRO. Actualizado: GuardarJohn Kerry necesitó cuatro meses para pisar Egipto tras el golpe militar. El secretario de Estado visitó durante seis horas a su «socio estratégico» en la región y eligió la víspera del juicio a Mohamed Mursi como la fecha adecuada para mostrar el apoyo de Washington a las autoridades interinas. Fue un viaje relámpago y, como los que realiza a Irak o Afganistán, sin anuncio previo por motivos de seguridad. Kerry se reunió con la nueva cúpula egipcia, algo que también hizo en julio la alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Catherine Ashton, pero en su caso completó el viaje con una entrevista de dos horas con Mohamed Mursi, un gesto que no sirvió para mediar entre las dos caras de Egipto que siguen enfrentadas en las calles del país.
El contenido del encuentro se mantuvo tan en secreto como la ubicación del propio Mursi, a quien Ashton encontró tras un viaje en helicóptero a una instalación militar de la que aseguró desconocer la ubicación. La enviada de la UE calificó el encuentro de «amistoso, abierto y muy franco», pero no entró en los detalles de una charla a la que el diario 'Al Watan' asegura haber tenido acceso y en la que Mursi negó «de forma rotunda» su implicación en los asesinatos de los que le acusa y adelantó que «si voy a juicio, me defenderé yo mismo». Ashton le recordó, según el periódico, que «millones de egipcios salieron a las calles para pedir su dimisión, tenías que haber escuchado a la gente», a lo que el líder islamista respondió reconociendo la magnitud de las protestas, pero subrayando que «deberían haber esperado hasta las elecciones parlamentarias». El 29 de junio millones de egipcios se echaron a las calles para pedir la dimisión del presidente y cuatro días más tarde, gracias al apoyo del Ejército, lograron acabar con un mandato de apenas un año de la principal fuerza islamista del país, que había ganado las primeras elecciones libres del país. Esa movilización es calificada de 'revolución' por los detractores del expresidente y de 'golpe militar' por sus seguidores.