Mayor Oreja gana enteros para repetir como cabeza de lista del PP en las europeas
Ramón Jáuregui y López Aguilar se perfilan como principales opciones de la candidatura a Bruselas de los socialistas
Actualizado: GuardarLa carrera está abierta. Quedan siete meses para las elecciones europeas del 25 de mayo, las primeras que medirán el desgaste electoral del Gobierno y permitirán al PSOE tomar el pulso real de la sociedad. Los puestos garantizados están contados en ambos casos y los movimientos por hacerse con un lugar preeminente en las listas ya han comenzado. Contra pronóstico, Jaime Mayor Oreja puede repetir como número del PP en la candidatura a las Europeas, que se celebrarán en mayo del año que viene. Entre los posibles cabezas de cartel socialista destaca el exministro de Presidencia Ramón Jáuregui, pero también el actual líder del grupo parlamentario socialista en la Eurocámara, Juan Fernando López Aguilar.
Mayor Oreja se había distanciado en los últimos meses de la dirección nacional del PP, sobre todo tras afirmar que la puesta en libertad del etarra Josu Uribetxeberria Bolinaga, enfermo terminal de cáncer, fue producto del «mal llamado proceso de Paz que inició Zapatero», pero también «una decisión política» del actual ministro del Interior, Jorge Fernández, lo que provocó un tenso enfrentamiento entre ambos durante un comité ejecutivo nacional.
Mayor Oreja, sin embargo, ha moderado sus críticas en las últimas semanas. Se esperaba su reacción a la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de tumbar la doctrina Parot, pero el veterano político vasco ha intentado mantenerse en un discreto segundo plano.
Más allá de esta contención verbal, lo cierto es que Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal manejan encuestas que advierten, por un lado, de la posible pérdida de entre tres y siete parlamentarios de los 23 que obtuvo la formación de centro-derecha en los comicios de 2009. Además, los sondeos vaticinan una alta abstención ante el malestar que han provocado los severos ajustes y las reformas estructurales del Gobierno en una parte importante de la población.
Ante esta situación, los estrategas electorales del PP tienen claro que el objetivo de cara a mayo es fidelizar el apoyo del «votante del PP de toda la vida», es decir, el ala más conservadora del partido.
Jaime Mayor Oreja es tal vez el miembro del comité de dirección del PP que encarna en estos momentos los valores de la derecha tradicional. Por ello, Rajoy sopesa mantenerlo al frente de la candidatura, algo que no tenía tan claro antes del verano. Otras fuentes populares también apuntan al hecho de que, si tal y como señalan todos los indicios, los populares sufrirán un importante revés en las urnas, «ningún dirigente con aspiraciones futuras -no es el caso de Mayor Oreja- querrá correr ese riesgo».
En cualquier caso, el presidente del PP comunicará el cabeza de lista a finales de diciembre o principios de enero, tal y como hizo hace cinco años. Rajoy es reticente a modificar su Gabinete, pero nunca ha descartado la posibilidad de hacer su primera crisis de Ejecutivo coincidiendo con las elecciones europeas. El ministro que más papeletas tiene para irse a Bruselas es Miguel Arias Cañete, pero el titular de Agricultura suena para sustituir a Joaquín Almunia como comisario europeo, cargo para el que no necesita ser parlamentario europeo.
Más allá del cabeza de lista, también habrá lucha para formar parte de los 18 primeros puestos de la candidatura del PP al Parlamento Europeo que, salvo catástrofe popular, tendrían garantizada su acta. Un puesto de salida ya está reservado para Luis Ramón Valcárcel, actual presidente autonómico de Murcia. Otros barones territoriales, como el castellanoleonés Juan Vicente Herrera podrían seguirle los pasos.
Las perspectivas electorales del PSOE no son más halagüeñas, aunque ya ha pasado el temor a un severo castigo al bipartidismo. De hecho, en la dirección del PSOE aseguran que es más que posible ganar al PP esos comicios, siquiera por un diputado. En cualquier caso, los cálculos más realistas indican que tampoco en su caso hay garantía de más de 18 escaños (frente a los 23 a los que se llegó con la ampliación de la Eurocámara en esta legislatura).
Con esa convicción de que la victoria es posible, en Ferraz hablan de una candidatura liderada por pesos pesados. Y Jáuregui está entre ellos. El exministro ya ha trasladado a algunos compañeros su disposición a volver a Bruselas, donde desempeñó durante casi dos años el cargo de secretario general del grupo parlamentario. Ahora bien, quienes le conocen también aseguran que le preocupa la cuestión catalana y que no se irá si considera que puede desarrollar un papel importante en la resolución del conflicto territorial. A nadie se le ocultan tampoco los deseos de López Aguilar de permanecer en su puesto.
La incógnita, en principio, en el próximo Comité Federal, en diciembre o enero.