Merkel airea su sintonía con el SPD en una inédita visita al feudo socialdemócrata
La canciller alemana acude por primera vez a la sede de su eterno rival para exhibir los avances en las negociaciones hacia la 'gran coalición'
BERLÍN. Actualizado: GuardarLa novedad se merecía una salva de fotos. Pero no sólo de los profesionales de la información. Un buen número de funcionarios del Partido Socialdemócrata blandieron sus móviles inteligentes para captar una imagen insólita. La canciller federal, la cristianodemócrata Angela Merkel, en la Willy Brandt Haus, el santuario de la histórica formación de izquierdas alemana. «Me alegro de estar aquí», dijo Merkel al posar junto al presidente del SPD, Sigmar Gabriel, quien le mostró el atrio cubierto de la sede de su partido y la gigantesca estatua de su legendario presidente y antiguo canciller Willy Brandt.
Fotos para la posteridad también hicieron dirigentes conservadores que acudían como huéspedes a la sede de sus principales rivales políticos y futuros socios de gobierno, como el líder del grupo parlamentario de la Unión, Volker Kauder. Acompañada por su delegación de 45 cristianodemócratas y socialcristianos bávaros (CDU/CSU), Merkel acudió ayer a la central del SPD para asistir a la segunda sesión plenaria de la comisión tripartita que negocia la formación de una 'gran coalición' tras las elecciones legislativas del 22 de setiembre. Los 75 miembros se reunieron en la moderna Sala Hans Jochen Vogel de 200 metros cuadrados en la quinta planta del edificio para analizar los progresos alcanzados después de una semana de intenso trabajo conjunto.
Hay ya acuerdos entre conservadores y socialdemócratas en materia de política europea. Consenso para la introducción del impuesto a las transacciones financieras y para un mayor y más estrecho control bancario. También en la necesidad de ayudar a los países en crisis de la zona euro, aunque en ese punto no se ha llegado al detalle, al igual que sobre la posibilidad de celebrar referendos a nivel continental para recuperar la confianza de los ciudadanos en la UE.
Ambas partes trataron de mostrar en la emblemática Willy Brandt Haus las coincidencias que les unen en una breve comparecencia ante la prensa. «Contamos con una base común y que queremos formar un gobierno responsable», aseguró Markus Söder, ministro de finanzas de Baviera, en nombre de la CSU. De celebrar «los acuerdos básicos» y el «debate lleno de consenso» se encarga Martin Schulz, el presidente del Parlamento Europeo y experto del SPD en materia europea.
Salario mínimo
De los 12 grupos de trabajo que negocian acuerdos en otras áreas se ha filtrado, entre tanto, que hay un acercamiento en la principal demanda del SPD, la introducción del salario mínimo interprofesional de 8,50 euros en todo el territorio federal. Sin embargo, la búsqueda de fórmula para llevarlo a cabo que satisfaga a ambas partes resulta complicada y acabará siendo discutida finalmente, como todas las materias que no se resuelvan a nivel de expertos, por los líderes de las tres formaciones implicadas: Merkel, Gabriel y Horst Seehofer, el presidente de la CSU y Baviera.
En otros asuntos, como la doble ciudadanía para los inmigrantes de países ajenos a la UE, medidas para fomentar la equiparación de la mujer o la protección de datos se da por hecho el acuerdo. Mientras, para otros grupos, como los de finanzas, energía o sanidad, los debates no han hecho sino comenzar y se necesitarán semanas para ir limando asperezas y acabar llegando a acuerdos. Conservadores y socialdemócratas se han dado de plazo hasta finales de noviembre para tratar de consensuar un acuerdo de gobierno. Hasta entonces tendrán muchas mas ocasiones de visitarse mutuamente.