Esperanza Aguirre afirma que no oyó ningún abucheo
MADRID. Actualizado: GuardarEstaba en primera línea junto al presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, la líder del PP vasco, Arantza Quiroga o el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, pero Esperanza Aguirre asegura que no oyó los gritos de «traidores» y «cobardes» dirigidos a los representantes del PP durante la concentración que celebró el domingo en Madrid la Asociación de Víctimas del Terrorismo en contra de la reciente sentencia del Tribunal de Estrasburgo sobre la doctrina Parot.
La expresidenta madrileña defendió que la decisión del Tribunal de Derechos Humanos -cuyos magistrados «no son jueces sino políticos», subrayó- supone una «humillación a las víctimas y un enaltecimiento de los asesinos». Y esa fue toda su respuesta. «Yo no oí ningún abucheo», dijo.
Aguirre trató así de eludir la polémica con un sector de su electorado, durante un acto conjunto con González. Pero no todos sus compañeros de partido optaron por la misma estrategia. Quiroga, que se desplazó desde el País Vasco para participar en la protesta, trató de quitar hierro al asunto pero no negó la mayor. «Hubo momentos duros -adujo en una entrevista en la Ser- pero se lleva en el cargo». «El dolor empuja a la gente a buscar a alguien a quien echar la culpa», argumentó. En todo caso, subrayó que es importante ser conscientes de que se ha derrotado al terrorismo.
La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mari Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, fue aún más tajante y coincidió con Dolores de Cospedal en que las críticas a algunos dirigentes del PP fueron «injustas». «Lo que sí eché en falta fue el apoyo del partido socialista y también -añadió- del PNV».