La madre de Sandra Palo y el padre de Marta del Castillo

El fin de la doctrina Parot también supone la inmediata salida de prisión de personas que cometieron horrendos crímenes ajenos al terrorismo. La AVT también quiso rendirles homenaje aprovechando la asistencia a la concentración de María del Mar Bermúdez, madre de Sandra Palo, Rosa Folch, madre de Desirée -una de las niñas de Alcàsser asesinadas en 1992, entre otros por Miguel Ricart, que podría beneficiarse de la decisión del Tribunal de Derechos Humanos - y Antonio del Castillo, padre de Marta del Castillo.

Bermúdez, que perdió a su hija en 2003, aseguró que es una «sinvergonzonería y un daño añadido gratuitamente» que la vida de sus seres queridos «no valga nada y, sin embargo, sí valga la de los asesinos y violadores».