Margallo: «El nacionalismo excluyente se cura leyendo»

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, apuntó ayer durante la celebración del Día de Naciones Unidas la que, a su juicio, sería la solución para el desafío independentista lanzado por Artur Mas y Esquerra en Cataluña. «Estoy absolutamente convencido de que el nacionalismo excluyente se cura leyendo y, además, viajando», afirmó el jefe de la diplomacia, quien a lo largo de los últimos meses se ha mostrado como uno de los miembros más beligerantes del Gobierno con los planteamientos soberanistas de los gobernantes de Cataluña. Margallo también valoró que en un mundo y una España que tienden al multilateralismo, el unilateralismo no tiene lugar de ser.

Margallo, quien ha reconocido que la actual tensión soberanista le produce una gran preocupación y tristeza, ha venido insistiendo a lo largo de los últimos meses en el perjuicio que causaría a los catalanes una declaración unilateral de independencia y su salida de España. El mayor de ellos sería la exclusión automática de Cataluña de la Unión Europea, ante la que como país independiente debería solicitar el proceso de adhesión. El ministro ha repetido que se trataría de una negociación que llevaría años y que, como requisito final, debería conllevar el visto bueno de todos los países miembros, incluida España.

Más recientemente, el ministro se opuso a que Mas interviniese el miércoles en el Foro Económico del Mediterráneo que se celebró en Barcelona, una decisión que causó un hondo malestar en el jefe del Ejecutivo catalán.

Consulta soberanista

Los grupos favorables a la convocatoria de la consulta soberanista catalana -CiU, ERC , ICV-EUiA y la CUP- ya han iniciado los contactos de cara a fijar un calendario que lleve al referéndum y decidir el procedimiento al que recurrirán para llevar su propuesta al Congreso.

Fuentes parlamentarias de todos estos grupos explicaron a Europa Press que las negociaciones arrancaron el miércoles por la tarde con «contactos multilaterales», y ayer ya se lo trasladaron al PSC, destacando que quieren que se sume al consenso pese a que los socialistas insisten en la vía federalista.

El inicio de estas conversaciones responde a la aprobación en el Parlamento catalán, el 27 de septiembre, de una propuesta de resolución que insta a la cámara a llevar una petición al Congreso de cara poder celebrar la consulta dentro de la legalidad y que advierte al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que el dialogo no puede «eternizarse» y debe dar frutos antes de fin de año.