Margallo admite un debate en el Ejecutivo sobre la crisis en Cataluña
MADRID. Actualizado: GuardarEl ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, no parece estar dispuesto a ceñirse a la estricta línea oficial de respuesta a la deriva soberanista de la Generalitat de Cataluña marcada por la vicepresidenta del Gobierno pese a los varios avisos públicos que en tal sentido le ha lanzado Soraya Sáenz de Santamaría.
El canciller, de hecho, admitió ayer que en el Ejecutivo existen diferentes opiniones sobre cómo se debería abordar este problema, que preocupa al equipo de Mariano Rajoy. García-Margallo, a preguntas de los periodistas sobre los distintos matices que se observan en el abordaje por el Ejecutivo de este asunto, respondió que «estudia, analiza y discute, porque hay pluralidad de miembros (en el Gobierno) y por lo tanto pluralidad de opiniones sobre todos los problemas que tiene la sociedad española».
En lo que sí que quiso el titular de Asuntos Exteriores adherirse a la línea oficial es en que una hipotética secesión catalana dejaría a este territorio «automáticamente» fuera de la Unión Europea y sin posibilidad alguna de retornar sin el beneplácito del Gobierno español. «Esa es una verdad tan inmutable como la ley de la gravedad», sentenció el ministro poco después de presentar en un acto público a su homóloga de Colombia, que se encuentra de visita en España.