La «hora más amarga» del eterno aliado
Philipp Rösler Liberales (FDP)
Actualizado: GuardarEl Partido Liberal Alemán (FDP), hasta ahora socio de Gobierno de la canciller Angela Merkel, admitió anoche que vive la «hora más amarga» desde su fundación después de conocer las primeras proyecciones de los resultados, que lo dejaban fuera del Bundestag al no alcanzar el mínimo del 5%. Con estos datos, el candidato a la Cancillería, Rainer Brüderle, compareció ante sus simpatizantes en la sede del partido en Berlín para reconocer la dureza del momento político de una formación que ha participado en la mayoría de los ejecutivos germanos de las últimas décadas.
«Habrá que esperar para ver si aún lo logramos», dijo un Brüderle que aún se agarraba a la esperanza del recuento final pero que no podía sino admitir que el grupo cosechó ayer «su peor resultado». Por ello, tanto Brüderle como el presidente de los liberales, Philipp Rösler -hasta ahora vicecanciller y ministro de Economía-, que compareció públicamente a su lado, asumieron sus respectivas «responsabilidades» e insinuaron que podrían dimitir de sus cargos en breve a consecuencia del fiasco electoral.
Poco antes, el secretario general del FDP, Christian Lindner, aseguró en declaraciones a ARD que la formación se enfrenta al peor momento que ha atravesado a lo largo de su historia en la que ha sido tradicional partido bisagra en Alemania, presente en 17 de los 22 gobiernos que ha habido en la República federal desde la II Guerra Mundial. Lindner reconoció que su formación no ha sabido llegar al votante que busca una política económica racional, y liberalismo en lo social, pero evitó buscar culpables. «Hay que repensar el FDP», afirmó el secretario general.
La suerte de los hasta ahora socios de Merkel no mejoró en las elecciones que se celebraron también ayer en el estado federado de Hesse (oeste del país). Los liberales tampoco superaron el corte del 5 % y según las proyecciones se quedarían en el 4,5% de los votos y fuera de la Cámara.