Carbures: ejemplo y esperanza

Cuando cualquier neófito escucha hablar a uno de los responsables de la empresa gaditana Carbures, llega a creer que el mundo entero será de fibra de carbono dentro de pocos años. Inicialmente, esta empresa se convirtió en vanguardia competitiva con la fabricación de piezas para aeronaves. Posteriormente, abrió su campo de acción a componentes de vehículos terrestres, de automóviles a motocicletas y trenes. Incluso mostró su versatilidad con un detalle publicitario ilustrativo al crear un estoque ligerísimo para un torero lesionado que no podía sujetar uno convencional (José Mari Manzanares). Fue un ejemplo de su amplitud de miras, de las inmensas posibilidades de ese material mágico en el que trabajan como los mejores del mundo, también llamado Composite. Durante la presentación de su nueva sede en la Zona Franca de Cádiz, Carbures presentó un proyecto con varios significados. Al mostrar su nueva sede, desveló que el edificio estará construido con componentes (de vigas a perfiles y fachadas) fabricados con fibra de carbono. De esta forma, además de anunciar una implantación que presumirá de tecnología, dejó abierto su nuevo mercado. Carbures es capaz de fabricar piezas para la construcción, infinitamente más ligeras y resistentes que las convencionales. Otra fuente de riqueza con la que mejorar unas cuentas, unas previsiones, que van como un cohete en la bolsa. De hecho, ya ha sido necesaria la quinta ampliación de capital. Con estos hechos, Carbures se convierte en un ejemplo empresarial en Cádiz, además de una esperanza de empleo y riqueza para una comarca necesitada de referentes, de proyectos exitosos y rentables, de esos que muestran que la creatividad y el esfuerzo tienen premio.