Damm gana la batalla por Pescanova y colocará en la presidencia a Juan Manuel Urgoiti
La cervecera se impone a la candidatura de Pescanem y logra un respaldo del 70,82% en una tensa junta de accionistas
MADRID. Actualizado: GuardarLa batalla por el timón de Pescanova ya tiene ganador. La candidatura encabezada por la cervecera Damm consiguió el respaldo del 70,82% de los votos -equivalentes a 11.026.960 acciones- durante la junta extraordinaria de accionistas celebrada ayer en Redondela (Pontevedra). El nuevo consejo de administración de la multinacional pesquera estará formado por siete miembros, tres de los cuales forman parte del órgano saliente. Casi con toda probabilidad, la presidencia recaerá en Juan Manuel Urgoiti, actual consejero independiente de Inditex y expresidente del Banco Gallego.
Los presagios de una intensa disputa entre las dos candidaduras que optaban a hacerse con las riendas de Pescanova se disiparon una vez Damm y sus grupos asociados -el fondo luxemburgués Luxemport e Iberfomento- lograron el apoyo mayoritario del capital de la compañía representado en la junta, que fue del 54,2%. La otra candidatura en liza, formada por los accionistas minoritarios de la empresa (Pescanem) y apoyada por el fondo estadounidense Cartesian -que proponía un consejo formado íntegramente por independientes-, ni siquiera se llegó a votar.
Algo que fue posible gracias al sistema de elección que imperó finalmente: el de las listas generales, y no consejero por consejero. Muchos de los presentes en la junta solicitaron, sin éxito, que se votara en primer lugar el número de miembros del consejo, y posteriormente la propuesta concreta de cada lista. El presidente de la junta, José María Pérez-Carasa, hombre cercano al hasta hace poco máximo responsable de la compañía, Manuel Fernández de Sousa, determinó que se votara la primera propuesta presentada, que en este caso era la de Damm. Dado lo irreconciliable de las posturas de las diferentes familias representadas en el capital social de la compañía, la junta se desarrolló en un clima de nervios y cierta tensión. Una de las intervenciones más esperadas de la jornada fue la de Fernández de Sousa, quien días atrás había avanzado su oposición a la candidatura de Damm. Fernández de Sousa, imputado por presunto falseamiento de información económico-financiera y de cuentas, entre otros delitos, no presentó ninguna propuesta, y advirtió de que el futuro de la compañía pasa por «nuevas personas, nuevas caras».
El consejero delegado y accionista de la compañía, Alfonso Paz-Andrade -también imputado en el caso que investiga el hundimiento de Pescanova- pidió al igual que De Sousa «nueva sangre» en el consejo. Paz-Andrade advirtió en su intervención de que la plancha ganadora estaba «seriamente viciada» ya que el presidente de Luxempart, uno de los aliados de Damm, sigue siendo dueño de Pescahold, empresa de la que De Sousa es administrador. Por si fuera poco, los accionistas minoritarios avanzaron la presentación de un conflicto de intereses ya que el representante de la cervecera en el consejo, José Carceller, ejerce una actividad relacionada con la cadena de alimentación.
Tres consejeros siguen
Finalmente, y después del cese del anterior consejo, la junta aprobó el nombramiento del nuevo órgano de gobierno, cuyo mandato durará cinco años, y que estará formado por los representantes de Luxempart (François Tesch) e Iberfomento (Fernando Herce), además de José Carceller, Yago Méndez, Luis Ángel Sánchez-Merlo, Alejandro Legarda y el más que probable presidente, Juan Manuel Urgoiti.
Tres de ellos -Carceller, Tesch y Méndez- se mantienen respecto al anterior consejo, lo que a juicio de Urgoiti no supondrá problema alguno ya que, aseguró, fueron ellos quienes denunciaron la actual situación de Pescanova, que se encuentra bajo administración concursal. En su primer mensaje a los accionistas, Urgoiti señaló que Pescanova necesita una quita en el convenio de acreedores de aproximadamente el 75%, y que los bancos «van a ser los protagonistas fundamentales en este momento». Según el informe del administrador concursal, la consultora Deloitte, Pescanova se enfrenta a una deuda de 3.674 millones de euros, de los que 1.700 corresponde a créditos con entidades financieras.
Urgoiti no cree que el proceso abierto en la Audiencia Nacional contra los anteriores gestores de la compañía -y que derivó en la imposición de una fianza civil de 54 millones de euros Pescanova S. A- afecte al futuro inmediato de la empresa «porque no está bien planteado».