Merkel desgrana los éxitos de su legislatura en la última sesión del Bundestag

No se molestó ni en luchar, polemizar o atacar a sus rivales políticos. La canciller alemana, Angela Merkel, aprovechó su intervención en la última sesión plenaria del Bundestag antes de las elecciones legislativas del próximo 22 de setiembre para explicar al detalle los éxitos de su Gobierno.

«Han sido cuatro años buenos para Alemania, porque hay más gente a la que le va bien», resumió la canciller, que seguiría gobernando como hasta ahora si no fuera por los comicios, ese engorroso trámite que ignoró prácticamente en su intervención y que afronta con una tranquilidad pasmosa ante la seguridad de que por tercera vez consecutiva volverá a ser la ganadora de la mano de la Unión de cristianodemócratas y socialcristianos bávaros.

Para los rivales que pretenden empañar sus logros y la buena situación económica de Alemania, el primero de ellos el candidato socialdemócrata a la cancillería, Peer Steinbrück, solo muestra incompresión. «No entiendo cómo no pueden alegrarse con nosotros. Ese es uno de sus problemas, que son incapaces de alegrarse del desarrollo en Alemania. Y eso a la gente no le gusta», dijo Merkel en un tono casi maternal, como si estuviera riñendo a un hijo.

Frente a un discurso en el que Merkel subrayó el fin del endeudamiento alemán a partir de 2014, el fuerte aumento de los ingresos tributarios, la fortaleza de su industria, la baja tasa de desempleo del 6,6% y el nivel de empleo más alto en la historia de Alemania, Steinbrück argumentó que el país «tiene bajo el nivel de azucar».