Rusia pide que se amplíen las inspecciones

Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China) se reunieron ayer a petición de Moscú. A juzgar por el comunicado emitido poco antes por el portavoz ruso de Exteriores, Alexánder Lukashévich, se trataría de plantear que los inspectores de Naciones Unidas actualmente sobre el terreno no limiten solamente la búsqueda de indicios del uso de armas químicas a las afueras de Damasco sino también a otros tres lugares más con el objetivo aparente de ganar tiempo.

«Las inspecciones deben ser realizadas, además de en los alrededores de Damasco, en otros tres lugares, entre ellos la localidad de Jan al-Asal», cerca de Aleppo, señaló Lukashévich. Según sus palabras, las informaciones sobre la intención de los expertos de regresar a La Haya con el objetivo de llevar las muestras recogidas a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPCW) «no debe obstaculizar que se culminen las inspecciones en las zonas establecidas en el acuerdo entre las autoridades sirias y la Secretaría general de la ONU» del pasado 13 agosto. Entonces, según el portavoz ruso, «se admitió la posibilidad de que las pesquisas duraran más tiempo si fuera necesario, y Damasco así lo demanda» ahora.

En conversación telefónica, el presidente Vladímir Putin y la canciller alemana, Angela Merkel, coincidieron en que el Consejo de Seguridad debe examinar el informe que preparen los inspectores antes de cualquier posible decisión sobre una intervención militar. Al mismo tiempo, la Armada rusa ha decidido reforzar su presencia en el Mediterráneo oriental con dos navíos más.