El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, a su llegada a la rueda de prensa. :: EFE
Economia

Economía estima que el tercer trimestre marcará el fin de la recesión

El 'número dos' del departamento que dirige Luis de Guindos augura una tasa de crecimiento de hasta dos décimas

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Para el Ministerio de Economía, el fin de la recesión ya tiene fecha: el tercer trimestre de 2013. Después de 27 meses de caídas intertrimestrales consecutivas, que han hundido la actividad y el consumo y generado decenas de miles de parados, el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, aseguró ayer que la actividad ha alcanzado un punto de «inflexión importante del ciclo». Entre julio y septiembre -avanzó- la actividad registrará una tasa de crecimiento de entre el 0% y el 0,2% respecto de abril-junio.

«Están sentadas las bases para la nueva tendencia que ponga fin a un proceso de recesión larga y profunda», explicó el 'número dos' del departamento de Luis de Guindos tras analizar los últimos datos de la contabilidad nacional trimestral publicados por el INE. Este organismo confirmó que España registró en el segundo trimestre un decrecimiento intertrimestral del 0,1%. Una tasa que agranda la caída del 0,4% sufrida en el primer cuarto del año, pero supone una moderación importante respecto de los agudos ritmos de descenso del último año y medio. En términos interanuales, la economía española marcó en el tercer trimestre un retroceso del 1,6%. La previsión oficial del Ejecutivo, confirmada por el secretario de Estado, es que en el conjunto de 2013 el PIB sufrirá una contracción del 1,3% respecto de 2012.

La última revisión de resultados de la contabilidad nacional, publicada por el INE el pasado martes, elevó dos décimas el descenso de la actividad, hasta el 1,6%. Una debacle que el organismo estadístico atribuye a la evolución negativa de la demanda nacional, en particular del consumo de hogares y administraciones públicas, que restó al PIB bastante más de lo calculado hasta esa fecha.

Jiménez Latorre señaló que la corrección a la baja de las cifras del PIB (que también afecta al último año de Gobierno del PSOE, en el que el crecimiento se limitó a un exiguo 0,1% frente al 0,4% anunciado), confirma que la economía habría estado «en recesión prácticamente desde 2008». El secretario de Estado explicó que el paréntesis de breve crecimiento logrado en los tres primerso trimestres de 2011 no puede considerarse una recuperación. «Al final el crecimiento de 2011 fue de tan solo una décima», sentenció.

Competitividad

Economía cree que el fin de la recesión vendrá acompañado, en la segunda mitad del año, por una moderación en la destrucción de empleo. El secretario de Estado insistió en la mejora de la competitividad y aseguró que la vitalidad de la demanda externa, con el consiguiente «buen comportamiento» de las exportaciones (crecieron un 9,2% en tasas anuales) y la menor caída del consumo privado están detrás de la caída mínima que marcó el PIB en el segundo trimestre (0,1%).

Los sindicatos no son tan optimistas como el Gobierno y alertan de que la revisión a la baja del PIB y de los datos de consumo ponen de manifiesto que el deterioro reciente de la economía española fue mucho peor de lo admitido por el Ejecutivo. UGT deduce de ello que la debacle ahora reconocida muestra «la inutilidad de las políticas (de ajuste y devaluación salarial) desarrolladas para hacer frente a la crisis y su impacto negativo sobre el consumo». «No existe la más mínima razón para el optimismo sobre la situación económica», denunció la central en un comunicado.

La evolución detallada del PIB publicada por el INE muestra que en el segundo trimestre la demanda nacional moderó un punto porcentual su caída respecto del anterior, hasta el 3,6%. Por su parte, la demanda externa redujo seis décimas su aportación al PIB, hasta el 2%. El empleo de la economía española desciende a un ritmo anual del 3,8%, siete décimas menos que en el primer trimestre, lo que supone aproximadamente la pérdida de 623.000 puestos de trabajo a tiempo completo en un año.