Merkel 'vuelve al colegio' en el inicio de la campaña electoral alemana
La canciller engrasa la maquinaria del partido segura de ganar las legislativas sin problemas y pendiente del papel de sus socios
BERLÍN. Actualizado: GuardarEn un papel inusual, pero más que satisfactorio, la canciller alemana, Angela Merkel, recuperó su agenda de trabajo al término de sus vacaciones en el Tirol italiano. Abrió la campaña electoral como una profesora de Historia de un instituto de enseñanza media en el popular barrio berlinés de Prenzlauer Berg. Cientos de adolescentes la recibieron como a una estrella musical, con aplausos y ovaciones.
Visiblemente divertida, Merkel estrechó manos y posó junto a muchos jóvenes que querían fotografiarse con sus teléfonos de última generación. Coincidiendo con el 52 aniversario del levantamiento del Muro de Berlín, la canciller acudió al instituto Heinrich Schliemann como profesora suplente para dar una clase de historia de Alemania y explicar a los jóvenes su experiencia personal en aquel momento histórico y como ciudadana de la desaparecida República Democrática Alemana.
«Tenía siete años, pero vi que mis padres se pusieron muy tristes», dijo la canciller, quien explicó antes de encerrarse en una clase con 26 alumnos que sus asignaturas preferidas fueron los idiomas y las Matemáticas.
Merkel tiene motivos para disfrutar de sus comparecencias públicas. Sus niveles de popularidad continúan en máximos y los sondeos dan por seguro que su formación, la CDU y sus colegas bávaros de la CSU, ganará las elecciones legislativas del próximo 22 de setiembre sobradamente y a una apreciable distancia de los socialdemócratas (SPD). A 40 días de los comicios, las encuestas conceden a la CDU hasta un 41% de votos, mientras el SPD conseguiría entre un 23 y un 25%. Los Verdes, aliados naturales de los socialdemocratas, oscilan entre un 13% y 14% y los liberales (FDP), los actuales socios de coalición de Merkel, rondan un ajustado 5%, el mínimo para conseguir representación parlamentaria. El espectro político lo cierra con un potencial 7% el partido de La Izquierda, la fusión de excomunistas germano orientales y disidentes del SPD con los que ningún partido quiere aliarse.
Juego de alianzas
Así las cosas, la actual coalición conservadora-liberal de Merkel, con hasta un 46% de votos, supera ampliamente a la alianza opositora de socialdemócratas y verdes, que en el mejor de los sondeos se sitúa siete puntos por debajo. La única duda es si Merkel y sus actuales socios conseguirán una mayoría suficiente en el parlamento para gobernar o si la canciller se verá obligada a buscar alternativas.
Su pragmatismo y versatilidad política le permiten jugar varias bazas. En el peor de los casos y si la alianza rojiverde no da una inesperada sorpresa, tendrá que buscar nuevo socio y negociar con algún partido de la actual oposición.
Con los socialdemócratas ya gobernó en gran coalición en su primera legislatura (2005-2009) y el que fue entonces su ministro de Finanzas, Peer Steinbrueck, es hoy su rival en la pugna por la Cancillería federal.
Una nueva gran coalición es incluso la opción de gobierno que más desean los alemanes, aunque tampoco les desagrada -y consideran que Merkel sería capaz de negociarlo- una alianza de conservadores y verdes. Estos últimos encabezan ya el Gobierno del Estado federado de Baden-Wuerttemberg, el más rico de Alemania, e incluso la Alcaldía de su capital, Stuttgart.
Y de ser socios de gobierno serios ya dejaron constancia las dos legislaturas que compartieron el poder con el canciller socialdemócrata Gerhard Schröeder.
de septiembre es la fecha de los comicios.
Es el porcentaje de votos que conceden las encuestas al partido de Merkel, CDU/CSU. El SPD conseguiría entre un 23% y un 25%; Los Verdes, un 14%; La Izquierda, un 7% y el FDP, un 5%.