Adif instala balizas que evitarían otro descarrilamiento
Actualizado: GuardarDesde el día después de la tragedia Adif, empresa pública responsable de la infraestructura ferroviaria, ha venido defendiendo que el trazado no fue responsable del descarrilamiento. Lo hace obligada por las dudas que han surgido sobre un tramo de apenas de cuatro kilómetros en los que los trenes deben frenar desde los 200 kilómetros por hora a 80 para superar una curva, la de A Grandeira, que muchos expertos califican como «complicada». Lo cierto es que, aunque el trazado no presente deficiencias, Adif ha elevado de forma notable la seguridad en torno a Angrois. De este modo, se ha rebajado la velocidad de paso por A Grandeira a 30 kilómetros por hora. Además se han colocado en el tramo previo tres balizas que alertan al maquinista mediante el sistema Asfa de que debe desacelerar. En caso de no rebajarse la velocidad el sistema realizaría un frenado de emergencia, lo que no sucedió la tarde del descarrilamiento. Adif asegura en cualquier caso que la normativa vigente no obligaba a que estas balizas hubiesen estado instaladas con anterioridad.