ZOIDO SE ENREDA EN LA MADEJA

L AS imágenes en política son reveladoras, tanto si son de algo o alguien pillado in fraganti como si son intencionadas. Las dos fotos elegidas de forma concienzuda por el equipo de Susana Díaz esta semana: una con los niños saharauis de vacaciones en Andalucía y otra con los niños músicos de Daniel Barenboim son de lectura para niños. Quieren decir: soy la presidenta, chicos. Todavía no lo es, pero ensaya o ejerce, que es lo mismo. Sonriente e institucional, Susana Díaz toma el relevo al presidente Griñán antes de que este dimita el día 27.

La futura presidenta aún saborea las mieles del ascenso y todavía en su rostro no hay atisbo del rictus amargo de las decisiones. Ya se le verá cuando tenga que decidir a quién deja, a quien quita y a quién pone en su futuro gobierno. Una papeleta difícil. El calvario de Griñán en el PSOE empezó cuando dejó fuera de su gobierno a los que le habían aupado a la presidencia. Ella ha sido contundente con las quinielas «sin fundamento», pero tras sus cortas vacaciones deberá hacer las suyas, estas sí con bastante fundamento para que nadie se le eche encima, empezando por los suyos. Será su primer examen. Nadie duda de que a Díaz se le mirará con lupa, por ser mujer, por ser relativamente joven y por llegar a la presidencia sin haber ganado unas elecciones.

Otra imagen que habla por sí sola es la de Juan Ignacio Zoido sonriente ante la figura enjuta del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, tras conceder este la zona franca a Sevilla. En una de las imágentes Zoido se agarra feliz a la bandera con el emblema de la capital andaluza: las siglas NODO con una madeja en medio. No se percató el presidente del PP andaluz del enredo que desencadenaría esta imagen: un enfado descomunal de la alcaldesa de su propio partido de Cádiz, Teófila Martínez, ya que la zona franca de esta ciudad se ve perjudicada.

Pero no se trata de rivalidades entre ciudades. El gesto y la polémica saca a flote los recelos de los dirigentes provinciales del PP hacia su máximo líder en Andalucía, ya que la foto da la razón a los que sospechan que Zoido solo trabaja para mantener la Alcaldía de Sevilla. Para algunos, es urgente que el partido elija no ya a un candidato, sino a un nuevo presidente. La encuesta de la Universidad de Granada ha sentado como una patada aunque ya se sabe que los sondeos son todos poco de fiar.

El PP presume de banquillo, pero por ahora en el terreno de juego solo hay un expresidente - Javier Arenas- acosado por el escándalo de corrupción de Bárcenas y a su sucesor -Zoido- pasando absolutamente de todo lo que no sea Sevilla, Sevilla, Sevilla..., como el himno de su equipo del alma. Ni José Luis Sanz en la portería, ni Carmen Crespo corriendo por la banda extenuada logran parar la goleada que está recibiendo el PP.