El PP ve un líder «reforzado» y una oposición «histérica»

Los dirigentes y barones del PP que ayer salieron a valorar el debate sobre el 'caso Bárcenas' celebrado el jueves en el Senado mostraron su satisfacción con el papel jugado por Mariano Rajoy y todos coincidieron en que su rol como presidente del Gobierno salió «reforzado» y «fortalecido».

En opinión de la mayoría, el jefe del Ejecutivo, con la más de una docena de veces que citó por primera vez el nombre del extesorero y con el reconocimiento de que se equivocó al darle su confianza y al confiar, posteriormente, en su presunta inocencia, cogió desprevenida a una oposición que describen como «histérica» y puso al descubierto su ofensiva partidista.

Consideran que Rajoy transmitió «seguridad» y «contundencia» en la narración de los hechos y que cerró completamente el paso a la cascada de peticiones de dimisión. Destacaron la firmeza con que su líder aclaró que no se plantea abandonar la Presidencia del Ejecutivo y que va a agotar la legislatura con la garantía que le da el apoyo de la mayoría absoluta popular. También creen que quien al tiempo lidera el PP dejó al partido a salvo de las acusaciones de financiación irregular y de abono de sobresueldos en negro a sus dirigentes.

La versión dada por el propio Gobierno es muy similar aunque algo más contenida e institucional, al estar ofrecida por Soraya Sáenz de Santamaría durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

La vicepresidenta leyó una respuesta ya preparada y dijo que Rajoy dio «explicaciones cumplidas» en una comparecencia que calificó de «clarificadora». En su opinión, lo más importante es que demostró la estabilidad de su Gabinete que continúa con el trabajo sin distracciones y el respeto por los valores consagrados en el Estado de derecho.