Draghi insiste en mantener abierta la puerta a una nueva rebaja de los tipos
El BCE mantiene el precio del dinero en el mínimo histórico del 0,5% y se plantea dar a conocer las actas de sus reuniones
BERLÍN. Actualizado: GuardarEl presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, volvió a repetir ayer lo que ya adelantó hace un mes: el BCE mantendrá abierta la puerta a una nueva rebaja de los tipos de interés oficiales en la zona euro si lo considera «necesario», y seguirá con su política de dinero barato durante un «tiempo prolongado». Una nueva inyección de tranquilidad del mandatario italiano a los mercados.
Durante la tradicional rueda de prensa posterior a la reunión mensual del consejo de gobierno del BCE, donde sus 23 miembros decidieron mantener el tipo de interés en su mínimo histórico del 0,5%, Draghi insistió en que esta decisión se basó en que las perspectivas que maneja el instituto emisor sobre la inflación hablan de estabilidad en el entorno, o incluso por debajo, del 2%.
«El consejo de gobierno del BCE espera que las tasas permanezcan en el nivel actual o más bajo durante un periodo de tiempo prolongado», afirmó Draghi en alusión a los tipos de interés. «No hemos llegado al cero por ciento, así que hay margen para mantenerlos o incluso bajarlos», recalcó. Mientras el BCE aprecie debilidad económica en los países de la zona euro y problemas en la concesión de crédito, seguirá en la senda de proporcionar dinero barato. Ese volvió a ser el mensaje que transmitió el economista italiano desde su torre de marfil en el corazón financiero de Fráncfort.
El presidente del BCE reconoció que la entidad sigue viendo ciertos «riesgos a la baja» para el crecimiento económico y sombrías perspectivas respecto a la la recuperación interna de algunos socios debido a la baja demanda. Sin embargo, se esforzó por pintar un panorama algo más esperanzador y aseguró que los recientes datos económicos dejan espacio para pensar en una mejora y en la expectativa de conseguir «estabilizar la actividad económica». No obstante, Mario Draghi volvió a alentar a los Gobiernos a seguir con sus programa de reformas y ajustes -que poco a poco empiezan a tener algún reflejo en la economía real-, y rechazó las críticas que apuntan a que la austeridad impuesta a muchos no ha tenido efecto alguno.
Para el mandatario italiano fenómenos como la reciente evolución al alza del sector exportador español -que ha disparado la balanza comercial- demuestran que esas críticas no son fundadas. «La economía global está mejorando paulatinamente; por eso es preciso seguir con las reformas», zanjó.
Transparencia
El otro gran asunto tratado en la reunión del BCE fue el de la conveniencia o no de dar a conocer las actas del consejo de gobierno. El propio Draghi se mostró a favor de acabar con el secretismo en torno a los debates internos del banco en una entrevista publicada el pasado miércoles en el diario alemán 'Süddeutsche Zeitung'; algo que calificó de un «paso próximo necesario». No obstante, ayer se mostró algo más cauto y, aunque prometió una mayor transparencia, advirtió de que esta apertura no puede ir en detrimento de la independencia de los miembros del consejo de gobierno a la hora de tomar sus decisiones.
Draghi anunció que el directorio del BCE trabaja para presentar una propuesta antes de que finalice el otoño, momento en el cual se empezará a debatir. El italiano rechazó las comparaciones con la Reserva Federal de Estados Unidos o el Banco de Inglaterra, que publican desde hace tiempo sus actas de las reuniones. «No somos ni Estados Unidos, ni Inglaterra o Japón; no representamos a un solo Estado. Representamos a los 17 países de la zona euro», afirmó sobre las dificultades que puede entrañar el hecho de que se sepa quién vota qué y por qué.
Miembros del consejo de gobierno del BCE como el presidente del Bundesbank alemán, Jens Weidmann, el alemán Jörg Asmussen o el francés Benoit Coeure, abogaron esta semana por hacer públicas las actas. «Más transparencia podría hacer que las decisiones del BCE se entendieran mucho mejor. En este sentido se daría un paso más para mejorar nuestra comunicación», declaró Weidmann al diario económico 'Handelsblatt'.