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Maduro se asienta entre batallas
El presidente venezolano consolida su liderazgo mientras lidia con el desabastecimiento, las críticas de la oposición y se encara con EE UU
LA HABANA. Actualizado: GuardarNicolás Maduro llegará hoy a la frontera colombo-venezolana para reconducir las relaciones bilaterales con su homólogo Juan Manuel Santos después de 90 días de aguantar el tipo. Su mandato no está siendo fácil. Maniobró para mantener la estabilidad pese a la crisis económica, el desabastecimiento, la negativa de la oposición a reconocer la legitimidad de su presidencia al apuntar a un fraude electoral y más recientemente acusándolo de ser colombiano. Se enfrentó a Estados Unidos al ofrecer asilo a Edward Snowden. Y se ha casado. Muchos frentes abiertos. Tantos que varios analistas advierten de un posible batacazo.
El sucesor de Hugo Chávez buscó respaldo internacional con catorce viajes al extranjero. Mientras, para ganarse a sus compatriotas recorre el país presentando su «Gobierno de calle» y su cruzada anticorrupción. Pero sus ataques contra los fraudulentos han destapado las pugnas internas del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Muchos de sus miembros son «boliburgueses», bolivarianos enriquecidos bajo el paraguas del chavismo.
Después de tanto hablar de amor y paz, Maduro propició un acercamiento con la Iglesia católica en aras de establecer un diálogo. Sin embargo, lo ha simultaneado con cargar con dureza contra sus adversarios, especialmente contra el partido Primero Justicia, al que pertenece su rival en las pasadas elecciones del 14 de abril, Henrique Capriles. El mandatario acusa a los dirigentes de la formación conservadora de «fascistas» y «asesinos» por las protestas contra su elección. Durante la agonía de Chávez, el Gobierno bolivariano también se propuso un «acercamiento» con Estados Unidos. Pero en seis meses lo han roto en dos ocasiones. La última, la semana pasada por las declaraciones de Samantha Power, nueva embajadora de Washington ante la ONU, al asegurar que luchará contra la «represión» en Venezuela. Maduro calificó las palabras de «infames» y exigió una «rectificación inmediata». Pero el Departamento de Estado respaldó la decisión de su funcionaria a favor de «las instituciones democráticas, respeto a la libertad de expresión, protección de la sociedad civil y mejoramiento del diálogo interno».
Rebrote de las tensiones
«Por las opiniones irrespetuosas», la cancillería del país bolivariano decidió entonces «dar por terminados los procesos iniciados en las conversaciones de Guatemala» para regularizar las relaciones con su primer socio comercial al que le vende 900.000 barriles de petróleo diarios en efectivo. En la causa de la actual ruptura subyace el ofrecimiento de asilo al exmiembro de la CIA y de la Agencia Nacional de Seguridad, quien ha pedido asilo temporal en Rusia. Washington advierte de «graves dificultades» si Snowden llega a Caracas.
Pese a los múltiples frentes abiertos, Maduro tuvo tiempo además para pasar por el juzgado. No respondió a afrentas. Dio el «sí quiero» formal a Cilia Flores, la «primera combatiente» y su compañera de vida de muchos años. Con ese cóctel ha logrado afianzarse en el poder. Así lo defiende el analista Nicmer Evans, director de Visor 360° Consultores y miembro del PSUV, al explicar que el mandatario «ha tenido un éxito importante logrando la gobernabilidad que estaba cuestionada desde el 14 de abril. Hoy en día están dadas las condiciones para decir que logró en corto tiempo la estabilidad para empezar una nueva etapa de relanzamiento del proyecto chavista».
Andrés Stambouli, director de la Maestría de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Metropolitana, por su parte, sostiene que la estrategia de Maduro ha dado resultado, de momento. «Por lo pronto hay calma en el país, aunque hay focos de protestas todos los días debido a que problemas como la inseguridad, la inflación y el desabastecimiento de productos de primera necesidad, los cuales se agravan día a día y podrían provocar que el descontento social vuelva a manifestarse masivamente en las calles», alertó. En ese sentido, afirmó que la solidez del actual Ejecutivo se comprobará en los comicios locales del 8 de diciembre.