Rubalcaba anuncia, el domingo, la ruptura de relaciones con el PP. :: JAVIER BARBANCHO / REUTERS
ESPAÑA

Rubalcaba intenta poner de acuerdo a toda la oposición contra Rajoy

El PSOE cree posible que dimita el presidente, pero la diferencia de criterios dificulta adoptar por una estrategia común

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El líder del PSOE se ha embarcado en la tarea de unir a los cinco grupos parlamentarios de la oposición en una estrategia común para forzar la dimisión de Mariano Rajoy. Aunque los socialistas creen que hay «muchas posibilidades» de lograr la renuncia del presidente del Gobierno tras las confesiones y acusaciones de Luis Bárcenas, la tarea no es fácil por la disparidad de criterios sobre lo que hay que hacer en estos momentos, como pudo constatar el líder de la oposición tras su primera ronda de contactos.

Dimisión del presidente, dimisión del Gobierno en bloque, elecciones anticipadas, moción de censura, comparecencia del jefe del Ejecutivo en el Parlamento. El abanico de posibilidades es tan amplio como grupos parlamentarios se sientan en el Congreso sin que se avizore por el momento un denominador común.

Rubalcaba, de todos modos, habló entre el domingo por la tarde y hoy con el líder de IU, Cayo Lara, y los portavoces de CiU, PNV y UPyD, Josep Antoni Duran Lleida, Aitor Esteban y Rosa Díez. Expuso a todos ellos la visión del PSOE sobre la situación de «bloqueo político» y la necesidad de que Rajoy dimita y sea sustituido al frente del Gobierno por otro miembro del PP. Los socialistas no son partidarios de un adelanto de las elecciones porque consideran que el PP, pese a todas las revelaciones del extesorero, está legitimado para gobernar tras su contundente triunfo en los comicios de 2011. El exministro Ramón Jáuregui fue muy claro al apuntar que «en este momento» a España «no le conviene que la crisis se convierta en un proceso electoral».

Un anticipo de las elecciones sería un mal escenario para el PSOE porque sigue hundido en las encuestas, no rentabiliza el desgaste del PP y ve cómo IU y UPyD crecen sondeo a sondeo. De hecho, las últimas encuestas publicadas por medios de comunicación dibujan un panorama político de muy difícil gobernabilidad, con un fuerte descenso de los populares, que de todos modos serían aún la primera fuerza, seguido de los socialistas que incluso perderían alguno de sus 110 escaños, y un notable crecimiento de las formaciones lideradas por Lara y Díez. Un cuadro que obligaría a alianzas inusuales en la política española porque los nacionalistas, los socios habituales de PP y PSOE, están estancados. Los socialistas son también reticentes a la moción de censura, aunque lo dicen en privado, porque en público defienden que «todas» las fórmulas parlamentarias son válidas para forzar la dimisión de Rajoy.

Una moción de 35 diputados

IU considera que la sustitución del presidente del Gobierno por otro miembro del PP es una respuesta insuficiente. Su postura es la de que Rajoy antes de dimitir debe redactar el decreto de disolución del Parlamento para que lo firme el Rey junto a la convocatoria de elecciones. La coalición convocó ayer una reunión extraordinaria de su dirección para analizar la situación, calibrar la oferta de Rubalcaba y oficializar su propuesta.

UPyD, en cambio, es partidaria de la presentación de una moción de censura, pero no que el PSOE lleve la iniciativa. Rosa Díez defendió que la iniciativa lleve la firma de 35 diputados, la cifra que exige el reglamento, de todos los grupos que deberían ponerse de acuerdo con el candidato, que en ningún caso sería un miembro de su partido. La portavoz de UPyD comentó el asunto con Rubalcaba el domingo, pero tampoco llegaron a ningún acuerdo, salvo el de dar «protagonismo» al Parlamento en esta crisis.

El líder socialista también conversó con los portavoces de CiU y PNV, los menos partidarios de actuaciones drásticas. Duran, hasta ahora, se ha limitado a pedir la comparecencia de Rajoy en el Congreso para dar explicaciones. Una idea con la que coincide en buena medida los nacionalistas vascos porque una moción de censura o las peticiones de dimisión son «gestos para la galería» dado que el PP tiene mayoría absoluta, según recordó el presidente del PNV, Andoni Ortuzar.

CiU, no obstante, introdujo una variante en su postura y se mostró dispuesto a secundar la moción de censura siempre y cuando el programa alternativo de de gobierno que se presente incluya la autorización a la consulta soberanista en Cataluña. Un planteamiento que tiene asegurado el no de los socialistas.