El Gobierno firma el cese de actividad de Garoña, aunque no descarta cambios

El Gobierno ordenó ayer el cese de explotación de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), aunque introducirá «las modificaciones normativas que sean necesarias» para facilitar su continuidad en un futuro «dado que el cese se produce por motivos económicos y no de seguridad». Así lo confirmó la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

La propietaria de la central -Nuclenor, participada al 50% por Iberdrola y Endesa- aseguró por su parte en un comunicado que la declaración de cese llega «como consecuencia de la entrada en vigor de la nueva Ley de Medidas Fiscales para la Sostenibilidad Energética», cuya aplicación supone un aumento de los costes de la central «en más de un 30%». A partir de ahora comienza la fase de predesmantelamiento de la instalación, por lo que la organización y las actividades «se irán adaptando progresivamente» a la nueva situación. Eso sí, en este periodo de transición que se abre ahora Nuclenor «no tomará decisiones irreversibles para la operación de la central» con vistas a una posible reapertura.