Rajoy pide a la banca que «esté a la altura de las circunstancias» y conceda créditos
El presidente expone en la Moncloa ante medio centenar de autónomos y pequeños empresarios su receta para fomentar el emprendimiento
MADRID. Actualizado: GuardarEl presidente del Gobierno pidió ayer a la banca que «esté a la altura de las circunstancias» y conceda créditos a las pequeñas y medianas empresas y autónomos, a quienes animó a «perseverar» en su afán por crear «bienestar, riqueza y puestos de trabajo».
Mariano Rajoy lanzó estos llamamientos al sector financiero y al pequeño empresario desde La Moncloa, donde recibió a medio centenar de emprendedores a fin de exponerles su receta para fomentar en España la creación de pequeños negocios. En un momento en que el desempleo está por las nubes (27,1%, según la última Encuesta de Población Activa), el Gobierno sitúa entre sus prioridades facilitar el emprendimiento como fuente de ocupación para los actuales parados.
Pero el camino para convertirse en empresario también está plagado de dificultades. Del discurso del presidente se desprende que el problema principal que acecha a quienes aspiran a iniciar sus propios negocios es el mismo que hoy atenaza al conjunto de la economía española: la falta de crédito. De ahí que hacia el final de su intervención, en la parte normalmente reservada para enviar los mensajes de calado, Rajoy lanzara -disfrazada de deseo- la siguiente demanda: «Espero que quien tiene que dar crédito esté a la altura de las circunstancias y que las líneas ICO (dotadas con 22.000 millones para financiar a las pequeñas empresas) se agoten y que, si es necesario, haya más en 2013», resaltó.
El presidente del Gobierno volvió a situar la escasez de financiación como su primera preocupación, por delante de la reducción del déficit público y de las reformas estructurales pendientes. «El primer objetivo es el crédito», manifestó en su intervención, después de enumerar los «signos positivos» que aprecia en las grandes cifras macroeconómicas. El problema es que el sector financiero no ha dado muestras de creerse que la recuperación sea un hecho ni de querer abrir el grifo en las actuales condiciones, en las que el marco regulatorio -que obliga a aumentar las provisiones para cubrir los riesgos de impagos- varía cada pocos meses y no está asegurada la solvencia de muchos de los peticionarios de préstamos.
Situación «difícil»
Frente a ese descreimiento, Rajoy puso en valor la reducción del déficit llevada a cabo en el último año, la mejora de la balanza comercial, la rebaja de la prima de riesgo, el recorte de la deuda externa y la ganancia de competitividad de la economía española. «La corrección de los desequilibrios económicos no llega (aún) a los ciudadanos, pero es el prólogo de la recuperación económica, del crecimiento y de la creación de empleo», recalcó.
El jefe del Ejecutivo considera «capital para hacerle la vida más fácil al emprendedor» restaurar la fluidez crediticia. De él depende la viabilidad de miles de pymes. Según la OCDE -explicó ante los emprendedores-, de cada diez nuevas empresas, siete no llegan a cumplir dos años y solo tres sobreviven. En ese sentido, destacó que «si se crean diez, tendremos tres» transcurrido ese lapso, pero «si creamos 10.000, tendremos 3.000». Recordó que España tiene más de tres millones de autónomos, el 13% de ellos con asalariados a su cargo. El 99% del total de empresas cuentan con menos de doscientos trabajadores y el 85% tienen menos de nueve. «Las pymes dan empleo a más del 75% de los trabajadores y para volver a crear empleo es necesario responder a sus necesidades», concluyó.
La Ley de Emprendedores incluye ayudas fiscales (el llamado IVA de caja y algunas deducciones por inversión y reinversión de beneficios), una agilización de la burocracia, que debería permitir abrir un negocio en «dieciocho horas hábiles» y facilidades en materia de visados para atraer talento e inversión.