El Parlamento andaluz rectifica y anula la subida de dietas a los portavoces

El Parlamento andaluz dio ayer marcha atrás ante la oleada de críticas a la subida de dietas del presidente de la cámara y los portavoces adjuntos acordada por PSOE, PP e IU. El acuerdo, uno de los pocos adoptados por unanimidad esta legislatura, se produjo hace dos meses, aunque no se hizo público.

El anuncio de la anulación se producía apenas unas horas después de que el incremento salarial saltara a la luz pública y tras un toque de atención del presidente autonómico José Antonio Griñán, por entender que no encajaba bien con las consignas de austeridad en los tiempos actuales. Era el propio Parlamento el que anunciaba que el presidente de la cámara propondrá al resto de formaciones la revocación de un acuerdo justificado por «la actividad que desarrollan dichos parlamentarios».

El aumento consistía en una subida del 20% a las dietas que cobraba el presidente, Manuel Gracia, en concepto de alojamiento y manutención, y que pasaban así de 500 a 600 euros. Además, se incorporaban a estos cobros los portavoces adjuntos -cuatro por el PSOE y el PP y uno por IU-, que ahora cobrarían 500 euros semanales pese a que varios de ellos son diputados por la circunscripción de Sevilla, provincia donde radica la sede parlamentaria. Se trata de una cantidad que ya recibían los miembros de la Mesa de Presidencia y los portavoces parlamentarios.

Para el resto de diputados autonómicos, la cuantía de estas dietas se reduce y varía desde los 200 a los 410 euros en función de la distancia desde su residencia habitual. Estas cantidades se suman a los 3.020 euros de sueldo base y otros complementos. Desde el PSOE, su vicesecretario general Mario Jiménez señaló que, sin dejar a valorar «la conveniencia posible» del acuerdo, era una decisión acertada «en un momento en el que tiene que imperar la austeridad».