Mariano Rajoy y François Hollande se disponen a atender a la prensa. :: ETIENNE LAURENT / EFE
ESPAÑA

Rajoy avisa a sus 'barones' de que, «guste o no», habrá déficit asimétrico

El jefe del Ejecutivo asume que no podrá contentar a todas las comunidades y vaticina que el acuerdo acabará «imponiéndose»

MADRID. Actualizado: Guardar
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A Mariano Rajoy no le tembló ayer el pulso. Un día después de constatar la beligerancia de sus barones con la idea de fijar objetivos de déficit diferenciados para las comunidades en función de su situación financiera y del impacto que sus cuentas en la economía española, advirtió de que seguirá adelante con su plan. «Es imposible que a todo el mundo le guste la solución que se adopte -dijo-, pero al final acabará imponiéndose un acuerdo». «Imponiéndose» es, en este caso, una palabra clave.

El jefe del Ejecutivo aseguró desde París, donde participó en unas jornadas sobre empleo juvenil junto al presidente de la República francesa, François Hollande, que, una vez Bruselas confirme hoy que autoriza a España a un objetivo de déficit del 6,3% y no del 3,5% para este año, el ministro de Hacienda «intentará» hablar con las comunidades, pero dio por hecho que será imposible contar con el beneplácito de todas sus comunidades y les advirtió: «Una distribución del déficit por comunidades tiene que haberla».

El caso es que, aunque nadie se ha movido en exceso de sus posiciones, 24 horas después de su cita con Rajoy varios barones populares contrarios a la asimetría dieron muestras de estar dispuestos a moderar sus reparos. Dos planteamientos del jefe del Ejecutivo durante la cita parecen ahora clave para sentar las bases de un acuerdo que, pese a todo, sigue siendo dificil: el compromiso de que, pase lo que pase, todas las comunidades tendrán que cumplir el objetivo del 0,7% en 2015, es decir, las diferencias que ahora se hacen son meramente temporales y excepcionales, y el de que a nadie se le autorizará este año un límite superior a la cifra con la que cerró 2012, o sea, que Cataluña, por poner un ejemplo, debe olvidarse de ese 2% de déficit que reclama.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, pidió en la cadena Ser que siempre que a quienes cumplieron en 2012 no se les «perjudique», que se «justifiquen» las diferencias y que se adapte el objetivo «a ese criterio que ha establecido el Gobierno de no tener más déficit que el año pasado», él estará de acuerdo. Esa condición implicaría que todas las comunidades sigan recortando. La Comunidad Valenciana cerró el año pasado en un 3,45%; Murcia, en un 3,02%; Andalucía, en un 2,02%; Cataluña, en un 1,96%, y Castilla-La Mancha, en el 1,53%. El resto quedaron por debajo del 1,5% comprometido. Y Extremadura llegó incluso al 0,69%.

El cántabro Ignacio Diego insistió en que el déficit asimétrico no le gusta, pero se mostró abierto a aceptar que solo haya un déficit «primario» común, es decir, una cifra que excluya los intereses de la deuda. Las comunidades que no cumplieron el tope de 2012 tuvieron que acogerse el pasado año al fondo de rescate autonómico habilitado por el Gobierno, el FLA, precisamente por sus dificultades para financiarse en los mercados.

Un problema serio

También la consejera de Hacienda de Castilla y León, Pilar del Olmo, moduló, siquiera ligeramente, su oposición a la asimetría y dijo que podría aceptarla si fuera fruto de un acuerdo porque «corrieran riesgo» los servicios sociales. Pero en todo caso, como el presidente madrileño, subrayó que lo que en ningún caso está dispuesto a asumir es que su comunidad salga perjudicada, esto es, que su déficit debe ser mayor del 0,7%, que era lo que estaba establecido antes de que Bruselas se mostrara favorable a una mayor flexiblización.

Rajoy hizo hincapié, precisamente, en que ahora se está hablando de un déficit autonómico del 1,2% y no del 0,7%. «Si no fuera así no tendríamos esta discusión -dijo- pero sí un problema seguro».