Fuel Fandango inunda el Baluarte de ritmo y buen rollo

Auténtico, divertido y veraniego. Así fue el concierto que el viernes ofreció Fuel Fandango en el Baluarte de la Candelaria. Nunca un directo fue más directo y real.

Desde el comienzo, media hora más tarde de lo previsto, el sonido característico de este dúo, formado por Nita y Ale Costa, que en esta ocasión venían acompañados por una guitarra, un bajo y una batería, desparramó ritmo por los cuatro costado.

Ninguno de los presentes se quedó indiferente ante el buen rollo que desprendían sus temas y la alegría de su vocalista. Una artista completa que no sólo canta si no que también toca la batería y que derrocha sofisticación y elegancia sobre el escenario, como las grandes artistas de los 50-60, y que sorprende entre temas cuando, con un acento muy cordobés, termina todas sus actuaciones con un 'grasias Cadi', propio de una autentica cantaora.

Junto a ella, Ale Costa, un músico-productor que, más tímido que la vocalista, se mostró divertido y entregado con el respetable gaditano. Él mueve el ritmo y marca el compás, pero deja que ella sea la gran protagonista. Se le veía entusiasmado con la respuesta de sus seguidores.

Fuel Fandango hizo un repaso por los temas que componen su último disco 'Trece lunas'. Con la luna como testigo, animaron al respetable con sus canciones que iban desde la electrónica al flamenco pasando por el pop más bailable. Nadie quedó indiferente, quitando un espectador de la primera fila al que la cantante se dirigió, tras darlo todo en uno de sus temas más cañeros, 'Nature', «el de los brazos cruzados ni con esto, ¡qué le vamos a hacer!», exclamó con bastante buen humor.

Está claro que ambos artistas se entienden a la perfección y que uno sin el otro no serían más que la mitad de un producto compactado, ideal para aquellos que buscan divertirse, bailar y olvidarse de la rutina por un rato.