Los voluntarios atienden a varias personas en un comedor social de Sevilla. :: JUAN CARLOS RANGEL
Sociedad

La pobreza crece un 8% por la crisis

Canarias, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Aragón, las regiones en las que más crece la miseria durante la recesión económica La desigualdad entre comunidades autónomas se duplica en los últimos cinco años, según un informe

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La crisis económica golpea con fuerza a los ciudadanos, no solo a sus bolsillos, sino también a servicios fundamentales como sanidad o educación. El deterioro de ese conjunto desde 2008 ha provocado un aumento de la pobreza en España de un 8%. Pero además, las dificultades no se reparten de manera equitativa. Todo lo contrario. De hecho, la desigualdad entre comunidades autónomas se ha duplicado desde el inicio de la crisis. Así lo refleja el informe 'Desarrollo humano y pobreza en España y sus comunidades autónomas' dado a conocer ayer por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y la Fundación Bancaja.

El índice de pobreza humana mide dos tipos de variables: una económica (renta y desempleo) y otra denominada capital humano (salud y educación). El estudio, realizado por los catedráticos Carmen Herrero (Universidad de Alicante) y Antonio Villar (Universidad Pablo de Olavide), no solo constata y pone cifras a una realidad palpable por cualquier persona (mayor pobreza) sino que también muestra cómo se reparte entre las comunidades. Desde que estalló la crisis en 2008 hasta 2011 la pobreza ha aumentado en 13 comunidades. Canarias, con un incremento del 21%, tiene el dudoso honor de encabezar ese preocupante ranking. Le siguen la Comunidad Valenciana (18%), Andalucía (16%) y Aragón (13%). Solo Navarra, País Vasco y La Rioja lograron reducir el índice de pobreza en el periodo analizado.

Por variables, la pobreza económica (que mide el efecto renta y el efecto desempleo) ha crecido un 17% en el conjunto nacional entre 2006 y 2011, y un 60 % desde 2008. Desde el inicio de la crisis, la caída del bienestar material -la renta- se ha situado de media en un 13,7%, oscilando entre un 20,4% para Andalucía y un 8,4% para Cataluña. Algo lógico teniendo en cuenta la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores y el aumento del desempleo.

Las diferencias entre comunidades según el índice de pobreza propuesto por los investigadores (esperanza de vida, educación y PIB) vuelve a dejar constancia de las grandes distorsiones en función de las comunidades. En este sentido la evolución del desarrollo humano descendió a escala nacional un 4,4% desde el inicio de la crisis. La mayor disminución se produjo en Andalucía (6,4%) y la menor, en Cataluña (2,7%). En este sentido, los autores explicaron que tanto la estructura productiva de las comunidades como el nivel educativo y de formación profesional ha pesado en estas diferencias. En opinión del catedrático Herrero, el estudio muestra cómo la formación profesional «no ha sido lo suficientemente atractiva para rellenar huecos» en el mercado laboral y, por tanto, contribuir a reducir el alto nivel de desempleo.

Sin embargo, la variable que mide la salud y educación no se ha visto afectada en el periodo analizado. Según los expertos, esto se debe a que los recortes realizados en estos apartados se produjeron más tarde y, además, tienen consecuencias a más largo plazo. «La variable de salud se verá afectada si el sistema sanitario público sufre un deterioro importante y la pobreza se extiende», explica el informe. «Si el período de crisis se prolonga, la tendencia previsible es la de un mayor deterioro del bienestar material, un ligero deterioro de la variable de salud y un ligero repunte en educación». Los autores señalaron las políticas de recortes como responsables del aumento de la pobreza que recoge el informe.

Herrero criticó que en casi todos los casos, los ajustes que se están llevando a cabo son indiscriminados pero no se afrontan «como un cambio estructural». En su opinión eso está retrasando la salida de la crisis. Por su parte, a juicio de Villar, «no solo cuánto, sino cómo -se recorta- es lo importante», y agregó que ya no queda mucho espacio para hacer ajustes.