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Josep Piqué presidió una de las empresas que pagó de forma irregular a Urdangarin
Hacienda revela que el exministro abonó 365.000 euros al duque por sus consejos sobre «el mercado inmobiliario africano»
MADRID. Actualizado: GuardarEl nombre de Josep Piqué Camps, el que fuera ministro de los gobiernos de José María Aznar entre 1996 y 2002, también figura en el sumario del 'caso Nóos'. Piqué fue presidente entre diciembre de 2007 y marzo de 2010 de una de las empresas que pagó de forma presuntamente irregular a Iñaki Urdangarin por sus trabajos de asesoramiento sobre el mercado inmobiliario en el continente africano. El duque cobró esas remuneraciones parapetado tras la sociedad que compartía con la infanta Cristina para pagar menos impuestos.
Un informe de la Delegación Especial de Hacienda en Baleares, remitido el pasado 10 de abril al juez José Castro, revela que el ex ministro portavoz, de Asuntos Exteriores, de Industria y de Ciencia y Tecnología no ocupó un mero puesto representativo sino que fue titular o autorizado en hasta siete cuentas diferentes de la empresa Mixta África -cuatro en la Caja del Mediterráneo y tres en el Banco de Santander- precisamente en los años en que esa sociedad pagó hasta 365.328 euros al yerno del Rey como consejero de sus negocios en África.
Según los informes judiciales, el duque recibió dinero de esta empresa durante cuatro años por su asesoramiento sobre la construcción de casas sociales en países como Marruecos, Túnez, Argelia, Senegal, Mauritania y Egipto. Cobró 48.720 euros en 2006 cuando el ministro empezó a estar vinculado con Mixta como asesor; 257.520 en 2007, coincidiendo con la llegada de Piqué a la presidencia; al año siguiente fueron 53.520 euros; y en 2009, percibió 55.680. Urdangarin dejó de cobrar de esa sociedad el año en que Piqué salió del holding inmobiliario.
Más de un millón
Todos esos desembolsos, de acuerdo a la información de Hacienda, se realizaron desde Mixta África a la inmobiliaria Aizoon, la empresa de la que son propietarios al 50% los duques de Palma. Según Anticorrupción y el propio juez Castro, el cobro por parte de Aizoon por supuestos trabajos de asesoramiento personal de Urdangarin fue un fraude fiscal porque así se evitaba pagar tipos impositivos mayores, tributando aproximadamente un 25% en vez de sobre el 40% que correspondería por aquellos emolumentos. Esa misma práctica, la de facturar a través de la empresa que comparte con la infanta Cristina y no a su nombre, la repitió en innumerables ocasiones con supuestos trabajos realizados a Motorpress Iberica, Aceros Bergara, Pernod Ricard, Havas Sports France y Seeliger y Conde. Con esta táctica, según Hacienda y Anticorrupción, ocultó retribuciones por valor de un millón de euros de esas empresas, superando los 120.000 euros de fraude en 2007 y el 2008, lo que supondría delito fiscal.
Precisamente la Audiencia Provincial, en el auto en el que suspendió la imputación de Cristina de Borbón, instó al juez a profundizar en la investigación sobre la posibilidad de que la hija del Rey hubiese incurrido en un delito fiscal por permitir como socia de Aizoon que su marido usara la sociedad para facturar sus trabajos. «La infanta debería saber o conocer que para entonces Aizoon era una sociedad pantalla y que su marido la utilizaba para defraudar a Hacienda, tanto en el impuesto de sociedades como de las personas físicas», apuntó la resolución.
Se da la circunstancia de que en 2007 los duque de Palma, además, se convirtieron en socios minoritarios en Mixta África, al adquirir el 0,09% de las acciones de la promotora inmobiliaria por valor de 150.001 euros a través de Aizoon. A partir de ese momento, el matrimonio pasó a ser cliente y dueño de Mixta de manera simultánea.
Ni la empresa que presidía Piqué ni el resto de compañías pusieron impedimento alguno a pagar los trabajos personales de Urdangarin a nombre de Aizoon, según consta en el sumario.
Tampoco sus directivos pusieron problema alguno a desembolsar hasta 6.000 euros mensuales al yerno de don Juan Carlos, a pesar de que ni siquiera supieron explicar ante el juez a qué se dedicaba Urdangarin en Mixta África y cuáles fueron sus consejos. El sumario recoge los interrogatorios de tres de los responsables de esa sociedad, Marcel Escriba, Luis Hernández de Cabanyes y Eri Nemoto. Escriba admitió no tener «ni idea» de por qué se le pagaba y llegó a calificar de «estafa» que la compañía que presidía Pique abonase a Urdangarin 174.000 euros en un solo pago.