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Cadistas y portuenses firman un empate de hermandad
Con la permanencia en la mano, tanto Cádiz B como Racing Portuense juegan sin presión en El Rosal en un partido de ocasiones que acaba en tablas
PUERTO REAL. Actualizado: GuardarCuando un jugador de fútbol se libera de la necesidad de ganar y de los problemas clasificatorios, parece que todo es más fácil. Algo así pudieron vivir en una mañana calurosa en El Rosal los jugadores de Cádiz B y Racing Portuense. Con la permanencia atada, tanto para la escuadra de Carrillo como para la de Mere, ambos equipos salieron al campo principal de la ciudad deportiva cadista a divertirse y ofrecer un buen espectáculo a los espectadores presentes en el choque.
Con todo, las ganas de agradar se manifestaron en ocasiones que se fueron sucediendo durante el encuentro. La primera de ellas la protagonizó el visitante Jesuli con un lanzamiento de falta que se marchó al palo de la portería defendida por el portuense Borja. El filial cadista no tardaría en responder con un disparo de Titi que se fue rozando el larguero pasada la media hora de partido. Sin embargo, el gol estuvo a punto de llegar en una triple ocasión del Racing en la que el veterano Raúl López se quedó ante el cancerbero amarillo y, tras una serie de rechaces, fue finalmente la buena intervención del portero la que evitó el gol. Una jugada más protagonizaba los últimos minutos de la primera mitad. El portuense, pero local, Juanmi se quedó sin batir a su paisano Chico.
El tiempo de asueto permitía refrescarse a los jugadores. También a los aficionados de ambos equipos, sobre todo del Portuense, que copaban las gradas del Rosal. Con los segundos 45 minutos, los dos equipos se iban a lanzar en busca de la victoria. Una buena jugada de ataque racinguista acaba con un lanzamiento desde el vértice del área de Raúl Silveira. Su chut entraba por toda la escuadra del palo contrario y ponía el primero en el marcador, consiguiendo un tanto de bella factura. No obstante, poco duraría la alegría de los visitantes. En la jugada siguiente, el colegiado señalaba penalti de Alberto sobre el cadista Riki, que era derribado claramente en el área. Caballero no perdonaba y transformaba la pena máxima para poner la justicia en el marcador.
Con el empate, el filial protagonizó varias jugadas de ataque que a punto estuvieron de dejar los tres puntos en El Rosal. Sin embargo, la defensa del Racing y la falta de puntería cadista evitaron que el marcador se moviera más, de ahí que el reparto de punto fuese una realidad.
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