Libia exhibe al 'heredero' del exdictador e insiste en que no lo entregará a La Haya
ZINTAN. Actualizado: GuardarSaif al-Islam Gadafi, el hijo más conocido del fallecido dirigente libio Muamar Gadafi, compareció ayer brevemente ante un tribunal en la ciudad de Zintan, donde una milicia le mantiene retenido desde su captura en noviembre de 2011, según informó un responsable del consejo local. El que se consideraba 'heredero' del antiguo dictador sonrió y aseguró a los periodistas que se encuentra bien, en una exhibición con la que las autoridades libias pretenden acreditar que tendrá un juicio justo sin necesidad de ser transferido al Tribunal Penal Internacional (TPI), con sede en La Haya.
Saif al-Islam se enfrenta a dos procesos: uno ante el TPI por crímenes de guerra, y el que ahora se sigue en Libia bajo la acusación de haber proporcionado el año pasado información a la abogada australiana de la Corte Internacional Melinda Taylor, lo que según las autoridades libias puso en peligro la seguridad del país.
El hijo de Gadafi fue el único de los trece imputados citados a comparecer ayer en el tribunal por este cargo, y se limitó a confirmar que estaba en la sala cuando se leyó su nombre y asintió asimismo cuando le preguntaron si sus abogados estaban presentes. La vista quedó aplazada hasta el 19 de septiembre ya que la defensa necesita más tiempo para asesorar al acusado de manera competente.
La abogada del TPI Melinda Taylor fue detenida durante tres semanas tras reunirse con Saif al-Islam, quien supuestamente le habría entregado información y documentos sensibles. Taylor sostiene que su propia detención demuestra que el hijo de Gadafi no puede recibir un juicio justo en Libia y debería ser procesado en La Haya. Las autoridades libias, que quieren juzgar al acusado en el país, aún no le han imputado por crímenes de guerra, si bien el fiscal general ha dicho que se está preparando una causa contra él y pronto será presentada ante el tribunal.