VUELVEN LOS CATETOS BAJITOS

Está volviendo a pasar. Y es una pena. ¡Qué calamidad! ¡Con lo que se ganó a comienzos de la década de los 2000! Pues nada, no ha servido absolutamente para nada. Para volver a empezar de nuevo, otra vez. Y cansa. Y en parte, ya ni sorprende. Ya no sorprende pasar por la puerta de un colegio de CÁDIZ y verte a los dichosos ‘Messi’, ‘Cristiano Ronaldo’ y compañía correteando con las camisetitas de sus ídolos. La batalla está perdida. Otra vez, de nuevo. Los enanos catetos han vuelto a tomar los distintos patios de los colegios gaditanos. Y para colmo, seguro que esas estrellitas de turno serán los ases del balón en esos dichosos recreos en los que, los más valientes, esos que aún van de amarillo con la carita alzada y su bocata de mortadela en la mano, se conforman sólo con que no le pregunten por el resultado de su maldito Cádiz de las entretelas.

Se ha perdido, otra vez, el cadismo. De nada sirvió el dramático año de Orúe que unió a la familia cadista.Como tampoco la liguilla de ascenso con Jose González al aparato. ¡Y lo que ya es la monda!, tampoco el golazo en Chapín de Oli que llevó al Cádiz a Olimpo de los Dioses. Luego llegó Lobos y los niños compraron sus camisetas... Pero todo, poco a poco, se fue embarrando. Y ya se sabe, los niños sueñan y rara vez lo hacen en las profundidades de las cloacas. Salvo los elegidos, claro está.

Por todo esto, brindo por esos locos bajitos, delgados o rechonchos, gafotas o sin gafas, empollones o golfos, que van a su cole el día que toca gimnasia con su pedazo de camiseta del Cádiz llenitos del orgullo que dan los palos que se reciben durante una pasión. Y brindo por sus padres, porque son los responsables de mantener viva la llama del cadismo. Y lo hago, cómo no, con el vaso de cerveza que cada domingo regalará la voz con el escudo del CÁDIZCF. Hoy, más que nunca. Pese a todo.