Arriba a la izquierda se observa la ausencia de la imagen de San Agustín. :: C. R.
Chiclana

La imagen de San Agustín evita daños mayores por un rayo en La Soledad

La estructura de la capilla se encuentra en buen estado y no hubo que lamentar heridos a pesar de la alarma que se generó la noche del miércoles

CHICLANA. Actualizado: Guardar
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Suerte que San Agustín, junto a Santa Ángela, preside la zona más alta del campanario de la capilla de La Soledad. Más suerte aún que el primero portase una cruz metálica (de la que no se han encontrado restos) que atrajo uno de los rayos de la tormenta eléctrica que se produjo en la noche del miércoles, acompañada de una copiosa lluvia y unos sonoros truenos.

Suerte para los vecinos de la zona, pero muy poca para la estatua de mármol blanco del siglo XVII, que cayó fulminada junto a los cascotes de la torre en la que se ubicaba, provocando una gran alarma en La Soledad. La mayoría de vecinos salieron a la calle al oír el estruendo del golpe del santo franciscano sobre el asfalto, que quedó cubierto de escombros. Afortunadamente, las malas condiciones climáticas no invitaban a estar en la calle y nadie resultó herido, «sólo un par de coches que estaban aparcados cerca recibieron algunos golpes de los cascotes que cayeron», explicaron miembros de la Junta de Gobierno de La Soledad, que acudieron al lugar en cuanto fueron alertados. La calle La Vid quedó totalmente a oscuras por los efectos del rayo.

Desde las doce y media de la noche, hora aproximada en que ocurrieron los hechos, también se personaron Policía Local y Bomberos, que iniciaron el acotamiento de la zona para evitar riesgos y trasladaron los vehículos afectados. Los bomberos examinaron el lugar afectada y determinaron que no existía más riesgo de desprendimiento, no obstante la zona continuó preservada y no fue hasta la mañana de ayer cuando se restableció el tráfico de las calles anexas a la capilla. Al mismo tiempo, operarios municipales llevaron a cabo la limpieza de escombros en el lugar.

En 2010, la lluvia

Sebastián Estrada, segundo hermano mayor de la Hermandad de La Soledad, explicó ayer que ya «ha quedado comprobado que la capilla no ha sufrido ningún daño en su estructura y se puede seguir utilizando como siempre». Por eso, resaltó la necesidad de calmar las alarmas que se despertaron entre la ciudadanía la misma noche de la tormenta, «fue más el miedo que causó que los daños que al final se han registrado».

Asimismo, Estrada lamentó que ésta es la segunda vez en tres años que la capilla de La Soledad sufre daños a causa de las inclemencias meteorológicas y recordó que en 2010 «las lluvias hundieron el techo del campanario y hubo que reestructurarlo».