MUNDO

Escocia vota el 18 de septiembre de 2014

Al elegir esta fecha para el referéndum sobre la independencia, Alex Salmond trata de restar bazas a sus rivales políticosEl líder escocés sigue la tradición de fijar la consulta en jueves, antes del invierno y de las citas anuales de los partidos

LONDRES. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El referéndum por la independencia escocesa se celebrará el 18 de septiembre de 2014, según anunció ayer el Ejecutivo de Edimburgo al presentar en la Asamblea autonómica el proyecto de ley que regula la organización, el calendario y la financiación de las campañas de una consulta que responderá a esta pregunta: «¿Debe Escocia ser independiente? Sí/No».

La elección de la fecha estaba limitada por la costumbre de celebrar en jueves las consultas en Reino Unido. Es una tradición que viene de las tardes libres de algunos gremios en los jueves de cada semana. O quizás porque era un día popular para celebrar mercados. La justificación más frecuente dice que, siendo en jueves, ya se conoce el viernes el color del nuevo Gobierno después de unas elecciones,y el líder tiene tiempo de formarlo y de organizarse durante el fin de semana para comenzar su trabajo el lunes.

Después de saber que tenía que ser un jueves y que debía tener lugar antes del final de 2014, porque el Gobierno de Londres sólo ha cedido al de Edimburgo el poder para convocar este referéndum hasta que termine el próximo año, se podía descartar el período desde el final de octubre a diciembre, porque los días son breves, fríos, oscuros, la gente está enojada por el cambio en la luz y en el tiempo. El último jueves posible de octubre era el 16.

Adversarios sin plataforma

El 16 de octubre no podía ser porque en esa semana los escolares tienen las vacaciones de mitad de trimestre, que duran una semana, y que suelen ser aprovechadas por los padres para irse con sus hijos a algún lugar que les dé energía para afrontar lo que se avecina. Y, a partir de ahí, retrocediendo fechas, se chocaba con el peculiar calendario político británico, que comienza cada año con unas conferencias nacionales de los partidos.

Se suceden el Liberal-Demócrata, el Laborista y el Conservador, siempre por ese orden, y los encuentros consisten en una semana de discursos y reuniones. Líderes y afiliados debaten y se animan mutuamente, con la presencia de empresas que quieren influir en las políticas de los gobiernos, de diplomáticos y delegaciones internacionales y de un gran número de periodistas. La BBC, como parte de su servicio público, ofrece una gran cobertura a estas conferencias.

El Ejecutivo escocés, liderado por el nacionalista Alex Salmond, no podía convocar el referéndum y dejar que sus rivales, los tres grandes partidos que defienden la permanencia de Escocia en la unión, estuviesen todos los días de las últimas semanas en la televisión de forma gratuita. Situar el voto en el final de septiembre o al principio de octubre era regalar a los laboristas y a los conservadores una plataforma excepcional.

Por lo tanto, el 18 de septiembre, y que ardan los liberal-demócratas, que tenían marcadas en el calendario las fechas del 13 al 17 de ese mes para su conferencia anual, prevista en Liverpool. Como solo son ellos los perjudicados, la Comisión Electoral puede exigir de forma más viable que no se emitan mensajes relativos a Escocia en la conferencia, que además es la última antes de la celebración de elecciones generales británicas en 2015.

Sin evocación histórica

Los liberal-demócratas escoceses no podrán acudir a su conferencia federal, porque estarán en campaña, y entre ellos algunos flamantes rivales de Salmond, como el ministro para Escocia en el Gobierno de coalición de Londres, Michael Moore. Es posible también que no se pueda emitir la conferencia de su partido por la BBC en Escocia.

Diferentes medios señalaban ayer que la fecha es el centenario del sí real a la ley de Autonomía irlandesa de 1914 o el aniversario de la colocación de la primera piedra del Capitolio por George Washington. Salmond no ha indicado ninguna evocación histórica específica para este 18 de septiembre, pero anhelará que el ambiente del fin del verano de 2014 se imponga al temor del invierno en el espíritu de los votantes escoceses. Y debe de estar disfrutando con el enredo que ha causado ya a uno de sus principales opositores. Quedan 546 días.

En mayo de ese año, el SNP de Alex Salmond ganó las elecciones autonómicas con mayoría absoluta.