La letrada ecuatoriana Nina Pacari, durante su visita a España. :: LUIS ÁNGEL GÓMEZ
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«En Ecuador no hay democracia y sí utoritarismo»

La dirigente kichwa y exministra de Exteriores denuncia la supeditación de los poderes Judicial y Legislativo al presidente recién elegido Nina Pacari Abogada y líder indígena

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Cuando la abogada María Estela Vega se convirtió en la indígena Nina Pacari se produjo algo más que una reivindicación personal de su etnia kichwa. A partir de la década de los ochenta, la dirigente asumió un rol esencial en las demandas sociales, económicas y políticas de los nativos ecuatorianos, proceso que la convirtió en la primera diputada de ese origen que accedió a la Asamblea Nacional e, incluso, le otorgó la cartera de Asuntos Exteriores en 2003 durante el Gobierno de Lucio Gutiérrez. El recién reelegido presidente Rafael Correa mantiene un conflicto con las organizaciones aborígenes, contrarias al modelo de desarrollo propugnado desde las instituciones. La líder sudamericana viajó a España para hablar de esa estrategia de resistencia en un encuentro organizado por Misiones Diocesanas.

-¿A qué achaca el tercer triunfo electoral de Correa?

-A sus políticas asistenciales y a la concentración de poder en todos los ámbitos. Haciendo historia, se trata de la victoria más baja, con el 52% de los sufragios, y la lectura que se debe hacer es que existen visos de polarización, que no se le ha dado un cheque en blanco. El otro 50% le dice que ese no es el camino, que su administración ha de ser de otra naturaleza

-Ecuador es uno de los países con mayores tasas de crecimiento económico de Sudamérica. Ahora bien, ¿su apuesta por la expansión de los cultivos de biocombustibles y la peligrosa explotación petrolífera en el Amazonas no comportan graves riesgos sociales y ecológicos?

-El modelo de Correa consolida el modelo económico neoliberal con un discurso aparentemente de izquierda. Promueve la consolidación de la explotación petrolera, con reservas que se agotarán en escasos años, y la extracción minera a cielo abierto para generar unas ganancias que solo beneficiarán a las transnacionales y a los poderosos. Los cultivos de palma africana en la costa provocan la pérdida de calidad de vida y el desastre ambiental, acentúan la pobreza. ¿Crecimiento para quiénes? Ecuador sufre alto desempleo, una inflación considerable, no hay estabilidad. Pero el sistema financiero nunca ha ganado tanto como con este presidente, aunque el presidente le ataca verbalmente.

-Muchas comunidades indígenas recelan de la Administración y llevan a cabo iniciativas de carácter autogestionario, sobre todo en la sierra andina.

-Los pueblos nativos tienen una visión del mundo basada en la consolidación de su identidad ancestral y la economía comunitaria como eje del progreso. No se quieren poner al margen del Estado, pero es la exclusión oficial la que impulsa su autonomía. La Administración coarta la cooperación internacional y persigue al movimiento indígena con enjuiciamientos penales de sus líderes. La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) presentó una demanda de inconstitucionalidad contra la Ley de Minería, que afecta sobre todo a sus territorios, para salvaguardar la biodiversidad, hoy amenazada por la expansión brutal de esa industria.

-Usted ha sido miembro de la Corte Constitucional y también ha denunciado la pérdida de independencia del poder judicial.

-La reforma constitucional del pasado año ya avizoraba el peligro que resulta evidente, el control del poder judicial por el ejecutivo y la pérdida de la iniciativa legislativa por la Asamblea Nacional. La Cámara carece de labor fiscalizadora, encubre casos como el del primo de Correa, ex hombre fuerte que mintió sobre su titulación académica y ahora está fuera del país. Al no haber independencia de poderes, no hay democracia y sí autoritarismo. Lo hemos visto en el último proceso electoral, donde los espacios publicitarios no fueron manejados en igualdad de condiciones y primaba la campaña presidencial. El Consejo Electoral no se pronunció a pesar de que se presentaron denuncias. Las instituciones están controladas no por un partido específico, sino por el propio presidente.