EL JURAMENTO Leído antes del cónclave

«Todos y cada uno de nosotros prometemos, nos obligamos y juramos observar fiel y escrupulosamente todas las prescripciones contenidas en la Constitución Apostólica del Sumo Pontífice Juan Pablo II, Universi Dominici Gregis (...).

Ante todo, prometemos y juramos observar con la máxima fidelidad (...) el secreto sobre lo relacionado con la elección del Romano Pontífice y sobre lo que ocurre en el lugar de la elección concerniente directa o indirectamente al escrutinio. No violaremos este secreto ni durante ni después de la elección, a menos que sea dada autorización por el mismo Pontífice (...).

Luego, se presta juramento con la mano sobre la Biblia con esta fórmula, que ellos dicen en latín: «Y yo, (nombre de pila) cardenal (apellido), prometo, me obligo y juro. Así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mi mano».